El famoso “Pípila”, es un hombre muy querido por la afición, por su garra, su entrega y amor por la camiseta, cosas que como aficionado te gusta ver en los futbolistas de tu equipo. Pero algo pasa con este futbolista, que cada vez que el técnico lo pone de inicio en el partido no acaba por brillar de la manera que lo hace saliendo desde el banco, algo que ya hemos visto en otros jugadores, como era el caso de Damián Álvarez en su paso por Pachuca, pues lo mismo le pasa a Vilchis con el Morelia.

Hay que destacar las cualidades de este futbolista dentro del campo de juego, es muy rápido, ágil, desequilibrante y con un gran regate pero lo más importante es que se mata por cada balón. Solo que tiene ese pequeño defecto que funciona mejor de revulsivo, que cuando es llamado para ser titular, pareciera que Rodolfo se pierde dentro del campo, que no acaba de entrar de lleno en el ritmo de partido y no despliega el juego que todos le conocemos, esto es algo muy notorio, no se siente igual de cómodo de titular que entrando de cambio, algo cambia completamente.

Todo lo contrario ocurre cuando entra de cambio, se le ven unas ganas tremendas por enseñar su juego, por apoyar al equipo, por encarar a cada futbolista que se le pone enfrente. Siempre entra con un ritmo increíble, como si llevara todo el partido jugando, entra metido en el partido y muestra de lo que es capaz, ahí es cuando de verdad ayuda a su equipo y contagia a sus compañeros , este es el Vilchis que todos quieren ver.