La primera mitad del certamen ya voló y a estas alturas ya se vislumbra quiénes son candidatos al título, quiénes pueden competir en la Liguilla, los que mejor empiezan a pensar en el siguiente torneo y los que sufrirán en las últimas jornadas por el tema del descenso.

En el caso de Necaxa, la Liguilla luce más que complicada, pero, al mismo tiempo, los problemas de descenso casi se han superado; ha sido pues un torneo semiamargo para los Rayos, quienes probablemente comiencen a planear el próximo torneo en el que con un poco más de tranquilidad, puedan acercarse a lo hecho en el Apertura 2016, en el que se convirtieron en el caballo negro del torneo.

No es lo que se esperaba

Después del excelente semestre que lograron en su regreso al máximo circuito, se esperaban cosas más positivas de los Rayos que lo que han conseguido hasta el momento; ya que de ser una de las mejores defensas de la Liga y terminar como séptimos generales, al día de hoy son penúltimos generales y su defensa es una de las más goleadas.

¿Adiós a la Liguilla?

Los Rayos suman apenas 9 puntos en el mismo número de encuentros disputados, una cifra bastante alejada de las 26 unidades que les permitió disputar la Liguilla en el certamen anterior. Para poder igualar esa cifra, los de Aguascalientes están obligados a tener una productividad de puntos del 70% en lo que resta del Clausura 2017.

A nada de la salvación

A pesar de lo mal que la han pasado en este Clausura, el colchón de 26 puntos obtenidos en el Apertura 2016 les da una posición privilegiada en la lucha por el no descenso, a esto hay que sumarle lo mal que lo han hecho los otros involucrados en la parte baja de la Tabla Porcentual, dando como resultado que de conseguir entre 6 ó 7 puntos en las 8 jornadas restantes, los dirigidos por Alfonso Sosa conseguirán prolongar su estadía en la Primera División, por al menos, un año más.

Maturana respondiendo

En el encuentro frente a Atlas, Nicolás Maturana disputó la mayor cantidad de minutos (45) en un partido de Liga desde su incorporación en diciembre; antes de eso había jugado únicamente 21, 17, 9 y 1 minutos. Ante la  oportunidad que recibió por parte de su técnico, Maturana le cambió la cara a su equipo y fue el artífice no oficial del gol del empate de los albirrojos.

Sobreviviendo sin el capitán

Esta Jornada 9 fue la primera ocasión en que los rojiblancos tuvieron que arreglárselas sin su capitán recurrente, Marcos González. El brasileño nacionalizado chileno que, al parecer, sufrió una lesión muscular durante un entrenamiento y se espera esté fuera de acción dos semanas más.