Hoy, Pachuca es uno de los equipos más ganadores del balompié nacional. Ostenta seis títulos de liga y el mayor logró para un club mexicano a nivel internacional, el haber ganado la Copa Sudamericana, pone al club en un peldaño que ahora parece inalzanzable para cualquier equipo de la Liga. No obstante, hace apenas 20 años, los hidalguenses se distinguían por pelear constantemente el descenso y rara vez llegaban a clasificarse a la liguilla por el título. Gracias a una excelente directiva y una muy buena camada de jugadores, a finales de la década de los 90, todo cambió

Gabriel Esteban Caballero fue uno de los artífices del renacimiento de la institución y el club más añejo del futbol mexicano. El argentino naturalizado mexicano nació un 5 de febrero de 1971 en la ciudad de Rosario. Debutó a los 19 años en Central Córdoba, en donde se mantuvo casi cinco años. En 1994 pasa a ser adquirido por el equipo chileno Deportes Antofagasta, en el cual se convierte en figura del equipo tras anotar 22 goles en su estancia. Para 1995 el contención llega a México, donde comenzaría su legado.

Foto: Futbolsapiens
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La comarca sería su primera parada en el circuito. Poco tiempo le bastó para convertirse en titular indiscutible y para el Invierno 96 ya havía levantado su primer título. Pachuca se hace de sus servicios para la campaña Invierno 98 y al igual que en Torreón en tan solo un año volvió a levantar el trofeo de campeón. El invierno del 99 representaba el primer campeonato de Liga para los tuzos, y el segundo a nivel personal para Gabriel. En Invierno de 2001 los tuzos lo volvían a hacer.

En 2002 tuvo un breve paso por los rojinegros del Atlas, gracias a sus buenas actuaciones fue llamado a la selección por javier Aguirre y disputó el mundial de Corea-Japón. Un año después regresa a Pachuca para hacerse inmortal en la historia del club. Apertura 2003, tercer campeonato para los tuzos y cuarto título para Caballero.

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Foto: Frentetuzo

Caballero volvía a salir del equipo en 2005 para incorporarse a las filas del equipo poblano donde pasaría sin pena ni gloria para regresar después y por última vez al cuadro hidalguense. Sin embargo fue en el 2006 cuando lograría la hazaña más grande de su carrera. Los tuzos enfrentaban en la final  de la copa Sudamericana al Colo Colo. 2-1 terminaba el marcador y el equipo mexicano hacia historia.

El 2007 fue también un año ganador para el Pachuca y el argentino naturalizado mexicano. Un título más de liga (Apertura 2007) y Concacaf Liga Campeones y una Superliga, culminaban el palmarés de uno de los jugadores más ganadores en la historia del futbol mexicano. En el 2009 Caballero colgó los botines y se despedía del club que le dio todo como él lo hizo.

 

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