Los Tiburones Rojos de Veracruz cayeron este sábado por la mínima diferencia ante los Rojinegros del Atlas, luego de un autogol de Leobardo López sobre la recta final del encuentro, mismo que generó polémica pues se derivó de una diagonal en la que el balón ya había salido del terreno de juego.
Al término del encuentro, el estratega escualo Pablo Marini, atendió a los medios de comunicación y se dijo molesto por el arbitraje de Fernando Guerrero, pues considera que sus errores fueron puntuales y terminaron pesando en el marcador.
"No tenía que ser validado el gol en absoluto, el balón sale 30 centímetros, a veces la soberbia que tienen que piensan que son los mejores y se equivocan mucho, realmente no se entiende cómo están para eso pero bueno, estamos muy molestos con el arbitraje porque realmente fue decisivo en el resultado final".
Asimismo, el timonel argentino también hizo énfasis en que considera que el arbitraje tiene "temor" a la hora de sacar tarjetas hacia el veterano defensor mexicano, Rafael Márquez.
"No lo entiendo, cuando la Comisión de Arbitraje viene todos los días a hablar con nosotros, que estamos abiertos y después se cometen estos errores tan infantiles o que hay temor de expulsar a Rafael Márquez, no entiendo, hay cosas que no se explican más allá de que nosotros tuvimos y erramos muchas situaciones muy claras mano a mano y que realmente también nos preocupa, pero sí nos molesta mucho (el arbitraje) porque son los que tienen que impartir justicia y se están equivocando".
En cuanto a la expulsión de Hugo Cid, defensor de los Tiburones, Marini reconoció que pese a estar lejos, no duda en que debió haber visto el cartón rojo, aunque recalcó que previamente se le perdonó dicho cartón al capitán rojinegro.
"Estoy muy lejos de la jugada, pero supongo que sí fue expulsión, pero también tuvo que haber una expulsión anterior para Rafael Márquez que no se entiende por qué no lo expulsan y son situaciones que van condicionando, ni hablar del gol, que vuelvo a insistir, no tendría que haber sido válido".
Finalmente, Pablo reconoció que más allá de que su equipo tuvo oportunidades al frente, el empate hubiese sido un resultado justo.
"El primer tiempo Atlas fue mejor que nosotros a pesar de que tuvimos situaciones muy claras y en el segundo tiempo, fuimos mejor que Atlas, el resultado, con un gol que no tendría que ser, se podría haber llevado un punto", sentenció.