El nativo del Estado de México, Rodrigo “Gatito” Guerrero, le aplicó el cloroformo al filipino Jonathan Baat, quien sólo pudo soportar seis episodios de pie ante los poderoso puños del mexicano.

Guerrero comenzó el encuentro a tambor batiente, con hambre de triunfo, no obstante el asiático buscó ponerle alto a los embates nacionales con un buen juego de piernas y entrometiendo también sus propios puños.

Pero el cansancio y la técnica inferior acusaron recibo rápidamente para el filipino, pues aunque estaba teniendo una mejor actuación que el mexicano, no pudo cubrirse de un potente uper zurdo que le hizo estallar la quijada y quedarse sentado en la lona luego de la cuenta de protección.

Los jueces mostraron sus tarjetas a favor de Baat quien no pudo soportar el poder de puños del mexicano y quedó fulminado, lo que le dio a Guerrero de nueva cuenta la faja internacional Plata de las 118 libras del WBC.