La Ciudad de México amaneció cubierta de jerseys de todos los equipos de la NFL. Más de 5 mil aficionados al deporte de las tacleadas invadieron Paseo de la Reforma para acarrear el ovoide y comenzar desde temprano la celebración del Super Bowl XLIX.

Desde las siete de la mañana, 5mil 61 corredores dejaron el alma en cada uno de esos 10 kilómetros recorridos y la NFL arrancó de manera inusual en el país azteca el festejo del juego más importante de la temporada.

Por primera vez en los 49 años que lleva de celebrarse el Súper Bowl, los aficionados en México pudieron sentirse parte del juego, pues por la mente de la gran mayoría de los “runners” pasó la idea de emular a un jugador de NFL, que acarreaba el ovoide hasta las diagonales.

“Me sentía como corredor en una escapada de 90 yardas, ¡así me sentí!”, comentó Alejandro Piña, un participante que portaba orgulloso el jersey número 29 de DeMarco Murray, corredor de los Vaqueros de Dallas.

Los primeros metros se corrieron a tope, con la euforia desbordada y cientos de aficionados que alentaban entre gritos y silbidos a los corredores. Tal y como comienza un partido de NFL, comenzó el evento, cuando los jugadores salen desde el túnel al emparrillado con una sola meta en la mente: la victoria.

Ya en el último tramo, los únicos sonidos eran el de las pronunciadas exhalaciones de algunos corredores que administraban el oxígeno, así como el del contacto del calzado de los corredores con el asfalto, la concentración estaba al máximo.

Fueron 10 kilómetros en los que una mezcla entre adrenalina y gritos de aliento se hicieron presentes. . “¡Vamos, sí se puede!”, alentaban algunos competidores que buscaban impulsar a sus compañeros.

“¡Ya no les falta nada, vamos corredores!”, se escuchaba detrás de las vallas de seguridad en donde la afición se hizo presente para apoyar a los competidores.

La carrera terminó y fueron Antonio Herrera, que paró el crono en 34:35 minutos en la rama varonil y Ericka Cano, quien lo detuvo en 38:23 en la rama femenil, los dos más rápidos de la última mañana de la temporada de NFL.