Las esperanzas de medalla en clavados sincronizados en su rama varonil y femenil, además de tiro con arco en su modalidad individual y por equipos, con Aída Román a la cabeza, han dejado mucho qué desear en esta edición de los Juegos Olímpicos de verano.

Y es que no se entiende  la diferencia tan marcada en cuatro años. Aída Román se ve apresurada para sacar la flecha que pasaría al equipo femenil a la siguiente ronda ante China Taipei, quienes posteriormente ganarían el bronce, lo que provocó a obtener un cinco en el objetivo, dando al traste a todo esfuerzo de sus dos compañeras restantes.

Después, en la modalidad individual, Aída Román vuelve a tener una mala actuación y ahora menciona el tema del viento en el sambódromo de Río de Janeiro, el cual corre de la misma manera para todos los competidores. Sobrada desde el primer día de su participación, Aída regresa a casa y deja una amargura a la afición y, estoy seguro, a los directivos.

En clavados la cosa no es muy distinta. Germán Sánchez e Iván García se tiraron desde la plataforma de 10 metros sincronizados y lo hicieron mal al quedar en el quinto puesto. Como hace mucho tiempo, no se ve por dónde una buena actuación nacional en esta disciplina, ya que sus compañeras en el femenil, Paola Espinosa y Alejandra Orozco, también terminaron fuera del podio y en la sexta posición, algo exageradamente inusual con la gran escuela de clavados que hay en nuestro país, y la tradición de ganar una medalla. Sólo falta que Paola suba al medallero en su participación individual, a ver si ahí puede.

Del box ni hablar, la última medalla la ganó Christian Bejarano y no se ha recuperado de esa actuación.

Tri Sub 23

Vaya susto el que nos pegó la Selección Mexicana de futbol Sub 23 cuando perdía uno a cero contra un rival que no existe en el mapa futbolístico a nivel internacional. Y qué bueno que clavaron el gol para que despierten los aztecas y sepan que con la playera no se gana, que el único de este equipo que tiene medalla olímpica se llama Oribe Peralta, y que estos no son campeones en Londres 2012. Exceso de confianza es un término muy corto ante la impotencia de ver la marca contra Fiyi, las imprecisiones nacionales y jugar a reventar el balón fue la característica del primer tiempo que deben recordar, para no cometer el mismo error.

Ahora viene Corea del Sur y su empate contra Alemania obliga que los tres, junto con México, den partidos a ganar. Los teutones van contra Fiyi y está claro que irán por el triunfo y a llenarle la canasta, por si necesitan de la diferencia de goles. El representativo de Concacaf y los asiáticos se darán hasta con la cubeta puesto que a los coreanos les basta un empate, gracias a la diferencia de goles, y los aztecas deben ganar para evitar la calculadora al minuto 90. Se complicaron solitos.

Botepronto: Llegan Carlos Fierro y Raúl López por las lesiones de Oribe y Pizarro; ni modo, se jugaron el físico sin miedo y este es el resultado.

Préndela así, de volea.