Apenas una semana después de que se confirmará su llegada a la organización de los Los Ángeles Lakers, el pívot veterano de 36 años, Tyson Chandler, no para de mostrar un gran nivel con el equipo y a pesar de ser usado por Luke Walton en la segunda unidad, eso no le ha impedido al nacido en California el mostrarse y levantar la mano en las situaciones críticas de los partidos. 

El día de ayer no sería la excepción ya que los Lakers recibían la visita de los desastrosos Atlanta Hawks que a pesar de contar con buenas individualidades como Trae Young, Jeremy Lin, Taurean Prince, Kent Bazemore así como con la experiencia de Vince Carter, aún no han podido encontrar su mejor juego por lo que han caído a un récord significativamente por debajo de .500 en este arranque de temporada.

Como ya estamos acostumbrados con el equipo angelino, el duelo sería muy parejo de inicio a fin y se vivirían momentos de drama en el Staples Center antes del final del último cuarto. Lakers líderaban por un punto y con segundos por jugarse, el novato Young, atacó la pintura pero fue negado con una tapa de Tyson Chandler lo cual finiquitaría el partido dandole la victoria a los locales por un marcador de 107-106. Menciones especiales además del pívot para Lonzo Ball que registró 8 puntos, 6 rebotes y 11 asistencias mientras que LeBron James anotó 26 puntos acompañado de 7 rebotes y 4 asistencias.

Desde la llegada de Chandler a la plantilla, los Lakers han ganado sus tres partidos y encajan 90 puntos por cada 100 posesiones, mientras que sin el encajaban 110 puntos. Esto es una muestra del impacto que ha tenido el veterano con este grupo que aún esta intentando descifrar como podrán trabajar en conjunto para llegar lejos en la dura conferencia oeste.