Dos de la más fuertes potencias en la asociación se enfrentaron el día de ayer en lo que pudo ser un pequeño adelanto de lo que veremos en mayo durante las finales. Los Golden State Warriors visitaron el norte para enfrentarse a los Toronto Raptors en un juego que a pesar de las ausencias de Stephen Curry y Draymond Green por el lado visitante, pintaba para ser especial por el hecho de que se honraba a Craig Sager, ex comentarista histórico de la NBA que falleció hace un par de años.

El arranque sería dominación total por parte de los Raptors, eso sumado a las seis perdidas de balón de los Warriors en el primer cuarto, lo cual pondría a los locales en una situación para poder despegarse en el marcador desde temprano. A como los minutos pasaron, Golden State pico piedra hasta que logró empatar el marcador con tan solo ocho segundos restantes en el partido en gran parte gracias a Kevin Durant, quien anotó dos triples en el cierre para igualar la historia.

El encuentro se alargaría a los tiempos extra donde desafortunadamente para los actuales campeones de la liga, los canadienses lograrían cerrar el partido por un marcador de 131-128. Kawhi Leonard fue el mejor anotador de su equipo con 37 puntos mientras que Pascal Siakam registró la mejor noche en su carrera con 26 puntos en los 42 minutos de acción que vio. Tras el juego, Kawhi le expresó sus pensamientos acerca de su equipo y del duro partido que enfrentaron a Kristen Ledlow de NBA on TNT. ''En el tiempo extra continuamos encestando y jugando con mucha energía, eso fue lo que nos permitió salir con la victoria.... Todos en el equipo estamos en la misma página empezando por nuestro entrenador (Nick Nurse) y Kyle (Lowry), pero todavía ni siquiera es diciembre, la temporada está iniciando y ellos aún son los campeones, tenemos que seguir trabajando y tratar de mejorar'', dijo Leonard.

Por su parte, Durant guió a su equipo pero no le fue suficiente, el escolta anotó 51 puntos para así, haber anotado al menos 40 puntos en sus últimos tres partidos, una locura. Con su gran noche, el tridente de los Warriors (Curry, Thompson y Durant) se convirtieron en los primeros compañeros de equipo desde los Lakers en 1967, donde los tres lograron tener al menos un juego con la cifra de 50