Justo cuando parecía que DeMarcus Cousins estaba recuperando su mejor versión, el pívot de Los Ángeles Lakers volvió a sufrir una lesión de gravedad la cual lo apartará de las canchas de seis a ocho meses.

Según reporta Adrian Wojnarowski de ESPN, 'Boogie', se rompió el ligamento cruzado de la rodilla derecha durante una sesión de entrenamiento privada en Las Vegas, Nevada. Cousins firmó un contrato con los Lakers durante la agencia libre con una duración de un año y $3.5 millones de dólares.

Esta es la tercera lesión que Cousins sufre en los últimos dos años. El nacido en Alabama se rompió el tendón de Aquiles hace un par de temporadas cuando aún jugaba para los Pelicans y tuvo problemas en el cuádriceps el pasado año cuando militaba en los Warriors.

El entrenador de Golden State, Steve Kerr, expresó sus sentimientos acerca de la lesión de Cousins, situación que parece haberle afectado de gran manera.

''Estoy devastado. Ha tenido un par de años para el olvido. Estaba esperando que este fuera un buen año para el después de que se perdiera gran parte de la temporada pasada con nosotros. Todos estamos tristes por la noticia'', declaró.

En sus nueve temporadas en la NBA, Cousins ha promediado 21.2 puntos y 10.9 rebotes por partido, lo cual le ha válido para ser llamado al juego de estrellas en cuatro ocasiones distintas. Su capacidad de jugar en el poste así como de poder estirar la cancha y encestar el triple son unas de las razones de su éxito en la liga.

La lesión indica que el pívot titular para el conjunto angelino la siguiente temporada será JaVale McGee, jugador que será fundamental en su rol y se espera que haga una dupla en el 'FrontCourt' de LA con Anthony Davis.