Con la mira puesta en la Copa

Agustín Canapino realizó este miércoles un ensayo con el Chevrolet del equipo Jet Racing en Nueve de Julio. Apunta a llegar en óptimas condiciones a la definición de la Etapa Regular del TC en Rafaela.

Con la mira puesta en la Copa
El Titán se jugará su última chance de clasificar a la Copa de Oro (Fuente: Campeones).
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Por Diego Torrado

La Etapa Regular del Turismo Carretera llega a su final y nadie quiere quedarse afuera de la definición por el título. El próximo domingo 31 de agosto se conocerán los doce clasificados a la Copa de Oro tras la carrera a disputarse en Rafaela. Con seis lugares aún disponibles, son varios los aspirantes a ocuparlos. Uno de ellos es Agustín Canapino, quien este miércoles se dirigió junto al equipo Jet Racing hasta el autódromo de Nueve de Julio para realizar una intensa prueba preparatoria a bordo de su Chevrolet.

Tras un paso previo por el rolo de Fabio el Chino Martínez, motorista del arrecifeño, en donde se comprobó que el impulsor de la Chevy sufrió una merma en su rendimiento en las últimas carreras, el equipo aprovechó la posibilidad que dio la ACTC para realizar ensayos esta semana y continuó con sus desarrollos en pista. El objetivo comprende llegar de la mejor manera a la competencia definitoria, en donde el Titán necesita imperiosamente ser protagonista si aspira a formar parte de los clasificados a la Copa.

No se presenta fácil el escenario para el campeón 2010 de la especialidad. Con 179,5 puntos acumulados, Canapino se ubica 16° en el campeonato, a 23,5 unidades de distancia de Mariano Werner (Ford), quien hoy sería el último en obtener el pase a la definición del torneo, y con tres pilotos más entre ellos. Restando 47 puntos en disputa, la misión se muestra difícil, pero no imposible. La falta de confiabilidad exhibida por su auto, con gran cantidad de abandonos a lo largo del año, se erige como la causa principal de este presente y uno de los aspectos a mejorar si pretende irse del autódromo santafesino con una sonrisa.

En una carrera que se perfila para ser corrida "a matar o morir", el arrecifeño deberá arriesgar para avanzar procurando no exigir por demás a su bólido. El margen de error se ha achicado considerablemente y la hora de la verdad se acerca. Mientras la matemática lo respalde, el Titán mantiene las esperanzas.