Argentina logró el cuarto triunfo de su historia ante Brasil. Vaya paradoja, en todas las victorias albicelestes ante la canarinha estuvo presente el director técnico Diego Giustozzi, en dos como jugador y en las dos restantes como entrenador.

La selección nacional tuvo un gran partido, lo jugó a la perfección y terminó festejando. Tras un inicio parejo, donde ambos generaron chances, pero ninguno pudo convertir, los dirigidos por Giustozzi tomaron las riendas del encuentro y domianaron.

A los 12 minutos llegó el primer gol del partido. Crisitan Borruto elaboró una gran maniobra personal, se sacó de encima a Moro y luego definió eludiendo a Cidao para poner el 1 a 0.

Brasil no tuvo un primer tiempo, Argentina le quitó la pelota todo el tiempo, no lo dejó jugar y los de Serginho Bigode lo sufrieron. Se terminaba la primera etapa y todo indicaba que el equipo albiceleste se iría ganando a los vestuarios. Sin embargo a falta de 10 segundos para el final apareció Murilo para capturar un rebote de Nicolás Sarmiento y dejar las cosas 1 a 1.

La superioridad que mostró Argentina en la primera etapa no se plasmó en el marcador y el equipo nacional salió con todo en el complemento para ganarlo a puro golazo. Primero fue Maxi Rescia el que pinchó la pelota ante el achique de Cidao y un minuto má tarde Fernando Wilhelm con un terrible zurdazo estampó el 3 a 1.

La canarinha nunca estuvo cómoda con el juego. La desventaja en el marcador la obligó a ir a buscar el descuento y con más amor propio que eficacia hizo lucir en un par de ocasiones a Sarmiento.

Sobre el final, cuando Brasil ya estaba totalmente jugado en ataque, Argentina metió una gran contra y Pablo Taborda le cedió el gol a Fernando Wilhelm para que el capitán decrete el 4 a 1 final.

Este martes a las 14 hs Argentina definirá el título ante República Checa que venció 3 a 2 en los penales a Italia, tras igualar 1 a 1 en el tiempo regular.