Festival de San Sebastián (VI): variedad cinematográfica
Fotograma de la mexicana "Güeros". (Foto (sin efecto): amazonaws).

El Festival de San Sebastián va llegando a su recta final pero el nivel de las películas no baja, se mantiene. Es una de las cosas a destacar de este evento cinematográfico, de la variedad de temáticas y películas que uno se puede encontrar a lo largo de toda la semana y en un mismo día: tanto de directores consagrados como otros de amateurs, de películas américanas como asiáticas, rápidas y lentas... Y las tres películas del miércoles fueron muy diferentes entre ellas: Cain's Children del húngaro Marcell Geró, Eden de la francesa Mia Hansen-Løve y Güeros del mexicano Alonso Ruizpalacios.

La jornada empezó con el primer documental de este año dentro de la sección Nuevos Directores. Cain's Children gira en torno de dos hombres que, cuando eran jóvenes comitieron un crimen y cómo esto les ha afectado al resto de su vida. Sin duda es una temática muy interesante, y a lo largo de todo el metraje se ven facetas de estas personas que poca gente imaginaría; estableciendo un diálogo con los espectadores acerca de cómo un error en el pasado puede afectar a tu futuro de una forma muy nefasta.

"Cain's Children" es el primer documental presentado este año en la sección Nuevos Directores

Quizás el documental falla un poco en repetir demasiado alguna situación o ser un poco demasiado largo. Pero en algunos momentos emociona y mantiene el espectador bastante enganchado a la pantalla.

Las dos películas de tarde fueron más ágiles y narrativas. Por una parte, Eden, la última película de la joven francesa Mia Hansen-Løve, forma parte de la sección oficial. Este film narra el recorrido de un DJ francés, Paul, desde sus orígenes en los años 90 hasta la actualidad. Esta trama también le sirve de pretexto a la directora para plasmar en la película la evolución de la música electrónica, desde su popularización hasta la llegada al éxito de David Guetta.

Aunque la trama sea clásica y conocida (fama y declive de un artista), la importancia de esta película no se tiene que leer solo en este sentido. Se tiene que valorar conjuntamente con todo el mundo musical que va reflejando: como la película se va conteniendo, al igual que la música; como todo se va desarrollando y cambiando al ritmo de la música...

"Eden", en sección oficial, es un regalo para los oídos de cualquier fan de la música electrónica

Además la directora ha hecho un trabajo increible escogiendo las canciones, ya que ha utilizado aquellas más representativas de cada fase en la historia de la electrónica, empezando por el mítico Larry Levan (uno de los que iniciaron el movimiento) y acabando por los Daft Punk (aunque antes también se había usado algunas de las canciones primerizas del duet francés para la etapa de los inicios del siglo XXI). Para cualquier fan de la música electrónica, tanto clásica como actual, la película será un regalo para sus oídos. Para todos los demás, seguro que también la disfrutarán pero no con tanta afición. Un elogio a la electrónica, a la música y a los artistas.

Una ópera prima con sabor a premio

La última película de la jornada, Güeros es la ópera prima de Alonso Ruizpalacios y la que tiene más números de llevarse el premio de la Juventud (categoría en la que participan las obras de la sección Nuevos Directores y las primeras o segundas películas de los directores de Horizontes Latinos), ya que se ha llevado la ovación de toda la sala una vez finalizada la película.

Esta cuenta la historia de un joven que, junto con su hermano grande y el mejor amigo de éste, viajaran por la ciudad de México en busca de su artista de rock preferido. Una cinta ágil, entretenida, que en más de una ocasión hará pensar por su estilo narrativo y estilístico en artistas de la Nouvelle Vague, especialmente en Truffaut.

Alonso Ruizpalacios llama a la reflexión con una película ágil con sello de la Nouvelle Vague

Por su alma de estar y rodarlo todo en las calles, viajar por la ciudad enseñándola a los espectadores, e incluso usar el blanco y negro. Cargada de ironía y de momentos divertidos, es una película que llama a la reflexión y que se cuestiona todo: la sociedad mexicana, el sentido de las huelgas universitarias y como se hacen estas, el estado del cine actual, la concepción de los ídolos y quienes son estos en realidad...

Además de una fotografía genial, tiene un estilo de rodar y fijarse en todos los detalles, que le dan más emotividad a la cinta y un aire más artístico. Una ópera prima excelente de un director que ha demostrado que tiene mucho talento. En su ocasión, en Berlín ya recibió un premio de esta película en la categoría de directores amateurs y, posiblemente, en San Sebastián también lo recibirá.

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