No hay hermandad, está claro, no hay arreglo mucho menos, y es que en un emocionante partido celebrado en el Hidalgo, Tuzos venció 2-1 a su 'hermano administrativo, el León. Juego dramático que terminó por dejar al primero y segundo de la tabla en el juego más importante del torneo.

Fue el local quien, con todo el apoyo de su afición, comenzó a proponer más y por ende a generar ocasiones de gol. Al 14’, una muy clara que fue detenida por Yarbrough con el pie izquierdo, cuando el grito de gol ya se había escuchado; todo, en una excelsa triangulación entre Jara, ‘Urreta’ y Gutiérrez, definida por éste último.

Lo importante llegó poco después, al 22’, cuando en una nueva jugada colectiva, Urretaviscaya apareció en la esquina del área para enviar un disparo que, de manera desafortunada, desvío Diego Novaretti hacia su propio arco en el afán por cortarlo, tomando así mal parado al arquero. Era el 1-0 y el Hidalgo, que ya estaba encendido, explotó.

La Fiera quiso responder rápido en el cotejo, y es que la obligación ahora era de dos goles. Al 27’, ‘Chispa’ Velarde desaprovechó el empate luego de que el ‘Conejo’ le otorgara el rebote en un potente disparo de Cuevas. El grito quedó ahogado en la banca de Tena y volvió a quedar así en la siguiente jugada, cuando Novaretti envió remate por arriba del marco; estaba sin marca.

De pronto, fueron los Esmeraldas los que se mostraron más incisivos, puesto que inmediatamente después, el ‘Conejo’ hizo la primera gran atajada de la noche, en un remate al centro y con potencia que había hecho Burdisso. Sin ningún otro movimiento en la pizarra, el encuentro se fue al medio tiempo con una ventaja mínima para los Tuzos, que ya veían cerca la final.

Para el complemento, la Fiera era la obligada por obvias razones, así que el estratega movió piezas e hizo ingresar a Germán Cano, buscando más peligro al frente. Y en cuestión de minutos, al 59', encontró frutos, no con Cano sino con Elías Hernández, quien mandó trallazo que hizo carambolas en los postes y luego se metió a las redes.

El cotejo encontró un detonante en la igualada momentánea. En la siguiente acción, Boselli cayó derribado en el área por Murillo; los del bajío pedían penal, parecía que sí era. Pero Pachuca no tardó en responder, ahora con un tiro de media distancia de Pizarro que William sacó del ángulo; era un tanto cantado. 

El juego entraba en su recta final y la situación empezaba a tomar color de hormiga, y es que al 79’, Lozano disparó desde lejos y puso el balón en el travesaño, que luego rebotó en la espalda de Yarbrough y quedó cerca de colarse a la meta. La presión se sentía, el Hidalgo era un hervidero y los verdes, sólo necesitaban de una anotación.

Para el cierre, Burdisso jugaba de 'nueve', un delantero más, incluso tuvo dos jugadas que desaprovechó. Los Esmeraldas estaban volcados al frente, pero apenas tenía el balón, Pachuca aprovechaba para ganar tiempo e irse al frente.

En una de esas, Lozano metió el definitivo, el que mató; al 90', aprovechó una desatención defensiva, dejó a Magallón en el camino y venció a Yarbrough. Tuzos era finalista y el inmueble, que estaba a punto de reventar, una locura. Sin más que añadir, el silbante decretó el final y la eliminación de la Fiera, que a inicio de torneo tuvo que cambiar de técnico, que empezó una nueva era y que se quedó cerca de la final.