Con al menos cinco minutos de retraso y con un Estadio Corona al 80% de su capacidad, arrancó la fecha 2 en Torreón. Santos se presentaba en casa para inaugurar el Apertura 2014 ante su gente, con un par de nuevas incorporaciones y ya con tres puntos en la bolsa, correspondientes a la primera jornada. Cruz Azul llegaba con la presión de no haber ganado en casa pese al gran plantel de Luis Fernando Tena.
El partido inició con una polémica arbitral cuando Roberto García Orozco decidió no marcar la pena máxima a favor del cuadro albiverde, tras una fuerte barrida de Jesús Corona sobre Darwin Quintero. Posteriormente, fueron los visitantes quienes probaron en varias ocasiones al cancerbero de casa. Como buen anfitrión, Santos, de la mano de Rentería, dio los primeros avisos claros de peligrosidad, sin lograr concretar.
Tornado el cotejo en un intenso toma y daca, los argentinos Pavone y Formica se conjuntaron para que el segundo entrase solo ante Oswaldo y marcara el primero de la noche ante la imprudente salida del portero jalisciense. Durante los minutos siguientes, Santos perdió control del juego y la Máquina protagonizó la posesión del esférico, intentando ofender ahora por la olvidada banda izquierda.
Se reanudó el partido y con la entrada de Joao Rojas por el lesionado Barrera, Tena revolucionó el cuadro ofensor de su equipo. Por parte de la escuadra comarcana, el caboverdiano Djaniny aceleraba el calentamiento mientras que ‘Chuletita’ y Darwin provocaban el exalto del público con sus acciones que no lograban fructificar.
Santos empezó a atacar de gran manera, pero la buena actuación de los mundialistas ‘Maza’ Rodríguez y Jesús Corona le impedía nivelarse en el marcador. Entonces, el Cuerpo Técnico de Caixinha realizó sus dos últimos movimientos: un revolucionado Mauro Cejas y un todavía desorientado Djaniny Tavares.
Parecía que los Guerreros marcarían en cualquier instante, y fue cuando se combinaron los colombianos Quintero y Rentería. El 'Topo' remató de cabeza un centro a segundo poste de Carlos Darwin, adelantándose a lo que pudiera hacer Corona y dándole el tan ansiado gol a la afición de Torreón. Sin poder pronosticar que el encuentro terminaría con puntos divididos, los últimos minutos fueron un concierto de ensayos al marco por parte de verdiblancos y celestes.