Héctor Mancilla: el bombardero andino

Héctor Mancilla tuvo una fructífera carrera dentro del fútbol mexicano, lapso en el que vistió las playeras de Veracruz y Monarcas con excelentes números.

Héctor Mancilla: el bombardero andino
Foto: Agencias.
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Por J. Arturo Armas

Tras el duelo en que se enfrentaron Monarcas y Veracruz en la Liga Bancomer, VAVEL México recuerda a un hombre que logró brillar en el fútbol mexicano vistiendo ambas playeras: Héctor Mancilla.

Nacido en Los Lagos, Chile, Héctor Mancilla comenzó su carrera en el Santiago Morning de su ciudad natal, destacando y siendo fichado por el Huachipato, club con el que saltaría la fama hasta llegar al Colo Colo, el club más histórico del país andino. Con Colo Colo, Mancilla se proclamó campeón en el Clausura 2006, y en el mercado de verano se enrolaría en su primera aventura en el extranjero, llegando a las filas de los Tiburones Rojos.

Tomando en cuenta las limitantes que han rodeado al equipo escualo en la última década, se puede concluir que el debut de Mancilla como Tiburón fue muy bueno. Durante su primer torneo en el puerto, el chileno jugó 14 partidos donde anotó seis goles, que ayudaron a Veracruz a clasificar al repechaje hacia la Liguilla, mismo en el que serían eliminados por Chivas.

Durante su segundo torneo en Veracruz, el Clausura 2007, Mancilla disminuyó sus participaciones a nueve, pues comenzó a tener roces con la directiva y el cuerpo técnico debido a su estilo de vida y otras diferencias, pues era bien sabido en el puerto el gusto del andino por la vida nocturna. En esas nueve apariciones, anotó tres goles. En el siguiente torneo su situación mejoró un poco, jugando 14 partidos y metiendo seis goles, además de servir 5 asistencias, números notables para un equipo como Veracruz. Sin embargo, los problemas internos siguieron y la directiva jarocha envió a Mancilla a su filiar en la Primera A, los Tiburones Rojos de Coatzacolacos, donde Mancilla anotó ocho goles en el torneo, mientras que Veracruz descendía dándose el lujo de enviar a segunda a su mejor goleador; irónicamente, mientras el Tiburón bajaba, Mancilla subía…

El buen torneo con Coatzacoalcos, aunado a su desempeño en Veracruz, llevaron a Héctor a fichar con Toluca, equipo con el cual se coronó campeón de liga y de goleo. Tras su exitoso paso, viajó a Monterrey para vestirse con la playera de Tigres, donde también consiguió alzarse con el título, siendo el tercero de su carrera en México. Con tres exitosos torneos como felino, y un breve pero igual fructífero paso por Atlas, fue fichado con Monarcas Morelia para el Clausura 2013.

Su primer torneo con la monarquía fue brutal, jugando 14 partidos en los cuales se despacharía con 11 goles, mismos que clasificaron a Monarcas a la Liguilla, donde tristemente serían eliminados por Cruz Azul; en dicha serie, también se hizo presente el andino. En el Apertura 2013, su cantidad de goles bajó, más no así su desenvolvimiento dentro del campo, que le bastó para perforar las redes en ocho ocasiones. Por si fuera poco, estuvo presente en la conquista de la Copa MX por parte de Monarcas, el primer título en varios años para la institución purépecha. El Clausura 2014 supuso el último torneo de Mancilla con Monarcas y en México; anotó tres goles y dio el mismo número de asistencias. Problemas personales sumados a la “operación salida” de Monarcas, provocaron que el chileno se bajara del barco y buscara nuevos horizontes.

Pero si de algo no hay duda, es de que Héctor Mancilla ha sido uno de los grandes extranjeros en el fútbol mexicano durante la última década, sus campeonatos de goleo y colectivos lo avalan como un delantero sumamente rentable; y quién sabe, quizá pronto podamos disfrutarlo de vuelta en el fútbol mexicano.