El Ciclón de Boedo está en la ansia espera para hacer de local en su propio estadio. Las construcciones van avanzando en el Polideportivo y los dirigidos por Julio Lamas no ven la hora de tener su lugar para poder llevar a cabo todos sus objetivos.  Ahora hablando de básquet, San Lorenzo viene pasando por un momento muy irregular en la Liga: gana un partido y pierde otro. No encuentra la efectividad que tendría que tener con la calidad de jugadores que posee y se le torna complicado mantener el nivel. 

En el Hector Etchart (Ferro), ya que dejó de jugar en Nuñez, al Cuervo le tocaba enfrentar a Sionista de Paraná que se encuentra en las últimas posiciones de la Conferencia Norte y viene de lograr dos triunfos fundamentales frente a Obras Basket y Olímpico La Banda. A pesar de la remontada, el conjunto de Svetliza no pudo contra el poderoso San Lorenzo de Almagro y con una destacada actuación de Walter Herrmann (27 pts, 5/10 en triples y 7 reb), fue más que el rival y gozó del resultado.

No siempre se puede ganar jugando bien y este fue un clarísimo caso. En unos primeros minutos muy cerrados y sin quebrar el marcador, los errores ofensivos y defensivos eran cometidos por ambos equipos. El local intentó convertir con Fernando Martina en la zona pintada (10 pts) y los lanzamientos externos de Bernardo Musso (13 pts) y Marcos Mata ( 13 pts). Mientras que en SionistaJeremías Sandrini ingresando desde el banco de suplentes, aprovechó los espacios que tuvo el Azulgrana y aportó 14 tantos. Sin aprovechar la desigualdad de los players que tiene cada equipo, los de Boedo se fueron al descanso sólo 5 puntos arriba (39-34).

El tercer período fue un antes y un después para los conducidos por Lamas: con un parcial de 30 a 11, San Lorenzo hizo valer la jerarquía de sus jugadores y consiguó una ventaja de 64 a 50. Martina seguía acechando en la pintura y Herrmann, jugador que perteneció a la Generación Dorada, hizo estallar de alegría a todo Caballito con sus triples. El partido parejo y con poco juego, que se había llevado a cabo en los primeros veinte minutos, se transformó en una exhibición brindada por el alero santafesino y compañia.

Ya no había nada más que hacer, el Cuervo mantuvo el buen nivel y se llevó una abultada victoria por 84 a 65. Ahora son 21 los triunfos que lleva el equipo y se acomodó cerca de la cima en la Sur. En cambio, la otra cara de la moneda es Sionista que se hunde cada vez más en la franja peligrosa y teme del descendo. El "Fino" Herrmann, nacido en Venado Tuerto y con 36 años en su espalda, sigue dando sus frutos y cuando agarra una pelota naranja nadie lo puede parar. ¡Viejos son los trapos!