Berlín, Alemania. Tuvo lugar un nuevo Final Four para definir el mejor equipo del básquet europeo. Y tras ocho años el CSKA Moscú se logró coronar en una final para el infarto ante Fenerbahce que se definió en tiempo suplementario. Una de las mejores finales de esta competición y que quedara grabada por largo tiempo para los fans del elenco de la capital rusa.
La leyenda cuenta que nunca una final de Euroliga tuvo un equipo que domine todo el partido, sin embargo la primera mitad que jugo el CSKA fue magistral donde dominó al equipo turco más allá que el primer cuarto fue batallado (22-20 para CSKA). Pero el dominio se acentuó en el segundo periodo de la mano de Andrey Vorontsevich y Milos Teodosic y al llegar al descanso largo se encontraban con la gran ventaja de 50-30 a su favor.
El inicio del complemento le permitió al CSKA Moscú tomar la máxima ventaja a favor (53-32). Los dirigidos por Obradovic tocaban fondo fallando tiros de campo y tiros libres. Sin embargo Pero Antic y Kostas Sloukas se ponían al hombro el equipo y buscaban arrimarse. El tercer cuarto se iba con ventaja de 69-53 para los rusos.
El ultimo cuarto fue espectacular para Fenerbahce, aprovechando la abrupta caída de nivel de CSKA lograron ponerse solo un punto abajo con dos minutos por jugar (79-78). Una exquisita asistencia de Teodosic a Nando de Coló le daba ventaja de tres (81-78) que se esfumaba con un bombazo de Bobby Dixon (81-81) y tras dos libres de Sloukas, Fenerbahce lograba la delantera del juego (81-83) con solo 21 segundos por jugar. De Coló intentó un triple desesperado que Víctor Khryapa palmeo con solo 1 segundo en el reloj y mandó el encuentro al tiempo extra.
En los cinco adicionales, Nando de Coló se hizo amo y señor del encuentro anotando 10 puntos inclino la balanza por 101-96 y le dio la gran alegría al equipo de Moscú.
El francés Nando de Coló fue elegido el MVP de la final (previamente había sido seleccionado como MVP de la fase regular del torneo) con 22 puntos, 2 rebotes y 7 asistencias en 28 minutos.