Banfield seguirá apostando con el 4-2-1-3. Una línea defensiva de cuatro hombres, con dos centrales de buen juego aéreo y dos laterales, caracterizados por su técnica para el buen manejo de balón en la salida.
En este caso, la defensa típica de Banfield formaría con Gonzalo Bettini, Sergio Vittor , Nicolás Bianchi Arce/ Fabián Noguera y Luciano Civelli.
En la mitad de la cancha, dos volantes centrales; uno con más marca que sería Nicolas Domingo y el otro, con mas libertades a la hora de jugar, Walter Erviti.
Juan Cazares tomará el rol del enganche, delante de esta línea de dos mediocampistas y por detrás de la línea de los tres delanteros. El “10” contará con el talento propio para desequilibrar, romper líneas de manera individual o con un balón para asistir a los puntas. Pasador y de buen remate de media y larga distancia.
Arriba, los tres atacantes que toman los roles: como extremo izquierdo, Nicolás Bertolo, mientras que como extremo derecho estará Ricardo Noir y como centrodelantero Lucas Viatri, ganándole un poco de terreno al colombiano Mauricio Cuero.
Por otra parte, Enrique Bologna, ya recuperado de una grave lesión, será el dueño del arco en el comienzo del campeonato.
Velocidad, desbordes, diagonales, rotaciones. Infinidad de recursos en ataque con las que cuenta el “Taladro” a la hora de buscar el arco rival. La superioridad numérica se verá de mitad hacia delante, denotando orden para avanzar de manera escalonada, proyectando en ataque a más de cinco hombres en posiciones de peligro.
La colaboración es otro punto clave: las coberturas y el retroceso por los costados es un punto que si se establece de manera ordenada no habría problemas en el fondo.
Una de las desventajas que suele tener este sistema de juego, y que se vio en varios pasajes en Banfield, es cómo quedan parados en el fondo. Los descuidos por los laterales suelen ser frecuentes ya que el impulso del avance aleja a un rápido retroceso que descuidará a los defensores, expuestos al uno contra uno.