Uno de los puntos más elogiados de River durante el año pasado, donde cosechó cuatro títulos, era su fortaleza defensiva. Con Ramón Díaz, ensayo y error de por medio, se solidificó al línea de fondo con Gabriel Mercado, Jonatan Maidana, Eder Álvarez Balanta y Leonel Vangioni. Fue una muralla en las fechas finales del Torneo Final (de la fecha 13 hasta la Superfinal el Millo solo recibió tres goles), mientras que en el arco Marcelo Barovero y Leandro Chichizola brindaron seguridad plena.

Con Marcelo al mando, hubo un cambio en esa defensa y Ramiro Funes Mori ocupó el puesto del mundialista Balanta, y con otro libreto futbolístico el fondo seguía sin sobresaltos, al punto que durante las primeras cinco fechas del Torneo de Transición River solo recibió dos goles. En lo que va del Campeonato 2015, el Millo recibió 9 tantos, no mantuvo la valla invicta y solo Sarmiento y Atlético Rafaela fueron más vulnerados, con 10 tantos a cada uno.

River no mantuvo la valla invicta en el torneo ni en la Copa.

La problemática de la defensa se extiende a la Copa Libertadores, donde además de ser último de su grupo, no pudo conservar el cero en el arco: cuatro goles en los tres partidos, dos puntos y diferencia de gol de -2.

Lo llamativo es que el equipo de Gallardo mantuvo la misma alineación defensiva que el torneo pasado, alternando entre Barovero y Julio Chiarini (por la lesión de Trapito), y en lo que va del año solo en la serie de la Recopa ante San Lorenzo el equipo no recibió goles (ambos 1-0 para River).

Comparando con el semestre pasado: en los 32 partidos (torneo local, Copa Argentina y Copa Sudamericana) solo recibió 18 goles y 16 vallas invictas. En la actualidad, en 8 partidos entre Libertadores y campeonato al Millo le encajaron 13 tantos, siempre con goles en su meta

Las variantes de Gallardo no son muchas, ya que en los laterales tanto Augusto Solari como Bruno Urribarri siguen sin responder, no así Eder Balanta, que empieza a recobrar protagonismo, mientras que Germán Pezzella sigue aquejado de su lesión lumbar (ante Arsenal estuvo muy debajo de su nivel) y Emanuel Mammana es una de las promesas que quiere sumar minutos.

Gallardo dispone de pocas variantes en la defensa.

Los números muestran una regresión del nivel del fondo, que en su momento eran "de Selección". De ser una de sus principales armas a la inseguridad. A dejarse anticipar, dejar huecos en los pelotazos de los rivales, sin movilidad, perder en el juego aéreo, a no poder mantener el resultado y privar al equipo de victorias prácticamente aseguradas. Un cambio radical, al igual que en el mediocampo y la delantera (aunque River es el equipo más goleador del torneo local, con 13 goles).

El DT debe encontrarle la vuelta y solucionar el problema del  desorden táctico y la desconcentración antes que sea demasiado tarde. Para dejar de tener las defensas bajas.