Lo pidió especialmente Marcelo Gallardo. En el verano pasado, estuvo cerca de llegar pero las trabas burocráticas del Kasimpasa turco lo impidieron. Ahora, en condición de libre, Tabaré Viudez acordó su llegada al club (2,5 millones de dólares por el 70% del pase) e incluso entrena en Uruguay junto a Pablo Dolce, Preparador Físico de River.
Ahora bien, para que el delantero concrete su llegada formal tiene que pasar lo siguiente: que uno de los jugadores extrajeros del plantel sea vendido para liberar un cupo, es decir, que Teo Gutiérrez, Eder Álvarez Balanta o Rodrigo Mora sean tranferidos. No se cuenta a Carlos Sánchez, que ya obtuvo su ciudadanía argentina, y Camilo Mayada , que se incorporó recién este año y no se irá.
El uruguayo Mora ya inició el trámite para tener su doble ciudadanía, aunque no hay garantías que se efectúe al corto plazo, y por Viudez se necesita un camino más rápido, que es una venta, además necesaria para la economía del club.
Gutiérrez, que se encuentra con la selección colombiana preparándose para su debut en la Copa América, es el candidato más firme para emigrar (Corinthians está interesado), aunque la idea de la dirigencia es retenerlo para jugar el tramo final de la Copa Libertadores.
Balanta, por su parte, sigue recuprándose de la microfractura en su tibia derecha. Es uno de los jugadores más valiosos del plantel, pero la falta de continuidad por lesiones conspiran en su contra. En cada mercado de pases coquetea con su salida (Sampdoria vuelve a la carga por el defensor).
Mora estuvo a un paso del fútbol árabe a comienzo de año, pero se quedó y con sis ocho goles fue determinante en el semestre millonario. Desde Qatar buscan a la Pulga, pero es tan importante para el Muñeco que no emigrará a menos que llegue una oferta imposible de rechazar.
En pocas palabras, si Viudez empieza la pretemporada al corto plazo será por la partida de Eder o de Teo. ¿Quién se queda, quién se va?