Ex River que se pusieron la Blaulgrana

La contienda que se dará el día de mañana entre Barcelona y River, dejará una huella en el plano internacional, futbolísticamente hablando, y por esto se realizó el conteo de jugadores que supieron vestir los colores rojiblancos y blaugrana. Solo un puñado de futbolistas fueron capases de vestir las dos camisetas que representan una rica parte de la historia del balón pie.

Ex River que se pusieron la Blaulgrana
Javier Saviola (Foto: Diario Marca)
juanlagos
Por Juan Ignacio Lagos

Jugadores que se supieron poner ambas camisetas. En la lista son nueve jugadores en total con nombres del pasado y también en la actualidad. Futbolistas que deslumbraron en el plano mundial y que hoy en día sólo 4 quedan en actividad (Javier Mascherano, Javier Saviola, Alexis Sánchez y Maxi López)

La mayoría de los casos fue así. Un jugador de River o que pasó por el Millonario, la vidriera del fútbol nacional para el viejo continente, y así partían hacia Europa. Algunos ejemplos como: Bonano, Saviola y López lo hicieron directamente desembarcando en tierras españolas.

El recuento de futbolistas que jugaron con ambas camisetas comenzó cuando un jugador desconocido en Argentina supo brillar gracias a su habilidad, ayudado por su pequeña estatura, 1,69, y ahí despegó de su paso por Vélez Sarsfield para luego ir a River Plate. Florencio Caffaratti Chisalvo se ponía la banda roja en el pecho en el año 1939 y su paso sería fugaz. No tuvo su nivel deseado, mostró ciertos miedos que en un club como River no se podían permitir y luego de una temporada para el olvido partió hacia Banfield. Después de tres temporadas en el Taladro viajó a México para unirse al América y ahí dio el gran salto. En 1947, gracias a sus actuaciones brillantes en el fútbol mexicano arribó a tierras españolas para jugar en el Barcelona, al cual perteneció por dos temporadas en donde ganó dos títulos de liga y volvió a México, en donde disputó un año en Real España y cerró su carrera futbolística en San Sebastián de aquel país.

El segundo jugador que lució las dos camisetas fue Juan Carlos Heredia Araya. Comenzó su carrera en Belgrano de Córdoba y jugó una sola temporada. Luego partió a Rosario Central donde tuvo actuaciones de lujo que llamaron la atención de Porto de Portugal que se lo llevó a mitad de 1972. Después pasó al Elche de España para por último recalar en el Barcelona en el año 1974 en donde disputó 6 temporadas, en las cuales, ganó 1 Copa del Rey y 1 Recopa de Europa. Ya para 1980 el futbolista decidió volver a la Argentina y llegó a las filas de River Plate. No tuvo su nivel, es que mostró cuando partió hacia el viejo continente pero al menos ganó dos torneos locales para luego irse a Argentinos Juniors en donde finalizó su carrera.

Tuvieron que pasar muchos años para que otro hombre vistiera ambas casacas, ya que nos tenemos que adelantar 15 años para nombrar a Roberto Bonano.

Un arquero de lujo, medio loco pero seguro. El guardametas comenzó su carrera profesional en el año 1992 en Rosario Central. Compitió durante cuatro años en el club de rosario para luego ser transferido a River Plate. En la entidad de Núñez tuvo que pelear su puesto durante un tiempo prolongado ya que tenía como compañero, nada más y nada menos, que a Germán Burgos. Después de lograr la titularidad tan deseada el arquero del Millo se asentó en la posición durante cinco temporadas en las cuales consiguió 7 torneos, cinco locales y dos internacionales, para luego partir al Barcelona club que lo retuvo durante dos años. Roberto, jugó posteriormente en Real Murcia y Deportivo Alavés, institución en la cual se retiró Bonano.

Otro de los futbolistas que llegó en el año 1996 a River fue Juan Pablo Sorin, luego de jugar en Argentinos Juniors y Juventus. El lateral izquierdo que jugó en la selección nacional durante un largo tiempo, disputó con la banda en el pecho cuatro años de su carrera en los cuales obtuvo 6 torneos, cuatro locales y dos internacionales. Después de jugar en el Millo pasó al Cruzeiro de Brasil para después divagar por el viejo continente, en el año 2003 jugó para el Barcelona apenas 15 partidos,  hasta volver al equipo brasilero en el cual se retiró en el año 2009.

Un caso como el de Heredia, que primero visitó la camiseta del Barcelona y luego la de River, se repite en el año 1998. Juan Antonio Pizzi, futbolista que arrancó su carrera en Rosario Central, club en el que es ídolo, para luego partir hacia México y desde ahí dar el salto al viejo continente para recalar en Tenerife. Luego jugó en Valencia, Tenerife nuevamente y llegó al Barcelona en el año 1996. Se desempeñó en la institución Blaugrana por dos temporadas fue brillante ya que consiguió 6 títulos entre ellos la Supercopa de Europa y la Recopa de Europa. En 1998, Juan Antonio decidió volver al país y firmó con River, club en el cual tuvo actuaciones para no recordar ya que duró un solo año en el cual no consiguió levantar trofeos y anotó 11 goles en 35 partidos. Después de la temporada en el Millo volvió a la institución de sus amores, Rosario Central, en la cual jugó durante dos años para luego darle fin a su carrera.

En éste repaso se marcó un ícono que tiene dos frases. Mucha plata por un jugador que no tenía techo y que a la vez fue aplastado por la presión. Decir Javier Saviola es hablar de uno de los últimos número nueve a nivel mundial que sacó River. No era el clásico nueve que aguantaba, se codeaba con los centrales y metía goles de cabeza. Pero el Conejo siempre se las arregló para deslumbrar con sus gambetas y efectividad a propios y extraños. Un chico del club que debutó a los 16 años de la mano de Ramón Díaz y metió un gol en su primer partido. Buenos indicios.

Llegó a la primera y salió campeón. En el Apertura de 1999, el Conejo marcó 15 goles siendo el goleador del campeonato, segundo más joven en conseguir el galardón por detrás de Diego Armando Maradona por tan solo ocho días. Impresionante.

En el año 2000 también logró coronarse campeón del torneo Clausura con River y ya figuraba en el radar del viejo continente. La frutilla del postre de Javier fue el campeonato mundial sub-20 disputado en la Argentina en donde tuvo una actuación descomunal, la cual lo colocó como uno de las mejores promesas del fútbol mundial. Automáticamente el Barcelona lo contactó y se lo llevó por 36 millones de Euros, una cifra que rompió el mercado.

En el club catalán disputó tres temporadas y partió hacia Mónaco a préstamo y luego mediante la misma forma de contratación al Sevilla para luego retornar en el año 2006 al Barca. En ese año, el Conejo levantó la Supercopa de España y sorprendió a todos a fines del 2007 ya que al no contar con minutos en el club Blaugrana y su contrato ya finalizaba decidió fichar para el Real Madrid. En el club blanco duró dos temporadas en las cuales adquirió nuevos trofeos a su vitrina personal ya que se consagró campeón de la Supercopa de España y de la Liga de aquel país. En el año 2010 fue vendido al Benfica en donde tuvo actuaciones que deslumbraron a todos y ganó cuatro títulos en Portugal. Luego jugó en el Málaga de España, Olympiakos de Grecia (ganó la liga) y a mitad del 2015 firmó con el club de sus amores. Volvió a River para disputar la semifinal de la Copa Libertadores y aunque no tuvo muchos minutos en el campo de juego se coronó campeón de la competencia más importante de América y además ganó la Suruga Bank ante el Gamba Osaka en Japón. En la actualidad estará en el banco de relevos el día de mañana ante nada más y nada menos que el Barcelona por la final del Mundial de Clubes.

En el 2004 se transfirió a un jugador de River al Barcelona. Lo compararon con Caniggia en su llegada al aeropuerto de la ciudad. La gente lo besaba, le sacaban fotos y finalmente se fue por la puerta de atrás. Maximiliano López, ese rubio potente que tenía facetas de crack en River jugó desde el 2001 al 2004 en La Banda, en donde consiguió tres trofeos locales. Luego partió hacia el Barcelona por 6 millones de Euros y jugó dos temporadas en el club catalán. Ganó dos ligas locales y la UEFA Champios League.

Como es conocido en el ambiente del fútbol, Maxi divagó por 10 clubes en el viejo continente y también en Brasil, donde jugó en el Gremio una temporada y actualmente se encuentra en el Torino de Italia.

Javier Mascherano, otro símbolo de River que es referente en la selección nacional y que actualmente juega en el Barcelona. Comenzó su carrera en el Millo allá por el 2003. En el 2004 ganó el torneo clausura y partió hacia Brasil en el 2005. El Corinthians que ganó en ese año el torneo local gracias a Tevez y Masche, vendió a los dos argentinos al West Ham de Inglaterra al año siguiente. Tan solo le bastó una temporada en el club ingles que se salvó del descenso con actuaciones descollantes de Tevez en el ataque y Mascherano en el mediocampo, vendió al volante central al Liverpool. En el club grande de Inglaterra, Javier compartió el mediocampo con Steven Gerrard y jugó durante tres años en el club rojo para después llegar al Barcelona. En el club culé se desempeña como defensor central, ante la partida de Carles Puyol que se retiró del fútbol y se ganó un puesto de la mano de Guardiola. Desde ese entonces, hasta la actualidad obtuvo 12 títulos. Imbatible.

El último nombre de la lista de nueve jugadores es de un futbolista de Chile. Alexis Sánchez, que llegó a River en el año 2007 y estuvo una sola temporada en el Millo, en la cual sufrió una lesión dura en un partido ante Tigre que lo alejó de las canchas durante 3 meses. En el corto tiempo que se colocó La Banda ganó el torneo Clausura del 2008. Luego de jugar en River partió al Barcelona. En el club Blaugrana jugó tres temporadas y ganó 4 títulos. Actualmente está en el Arsenal de Inglaterra mostrando cualidades que lo posicionan como uno de los mejores futbolistas del mundo.

Nueve futbolistas que marcaron la historia del fútbol mundial. Grandes nombres fueron expuestos por River y Barcelona, dos clubes que solo selecciona lo mejor.