Este miércoles, por la tarde, Racing recibirá a Boca Juniors en la quinta fecha del Grupo 3 de la Copa Libertadores de América. El equipo Xeneize todavía no le pudo marcar en ninguna de las dos competiciones en las que se cruzó con la Academia, el torneo local y el certamen internacional.

De todas formas, el conjunto de Guillermo Barros Schelotto no llega al encuentro copero de la mejor forma, sino que está muy necesitado de resultados positivos.

En tanto, en la máxima competición sudamericana, los Azul y Oro, a pesar de estar segundo en su zona con seis puntos (Racing se ubica primero con ocho unidades), Bolívar y Deportivo Cali tienen una corta diferencia, en la que una victoria los puede poner a punto para hacerse con la clasificación a octavos. Asimismo, tras un mal arranque en la Libertadores -tres empates seguidos-, Boca arrancó la levantada la jornada pasada de la Copa, al vencer al club boliviano por 3 a 1.

Desde las estadísticas, las chances del equipo del Mellizo se mantienen intactas. El triunfo sobre el Primer Grande lo dejaría primero a la espera de jugar, de local, con Deportivo Cali (último en la tabla); en caso de empate, y si Bolívar le gana a los colombianos, podría seguir segundo por la posible diferencia de gol; si pierde, y ganan los bolivianos, quedaría tercero, mas si vence Cali, se encontraría segundo, pero con una clasificación muy apretada.

Por otra parte, en el fútbol doméstico, el Xeneize -octavo con 14 puntos- ve muy de lejos el posible campeonato. Si bien las chances matemáticas están, pero se tiene que dar resultados casi imposibles, como que todos los de arriba de la Zona 2 (Lanús, Estudiantes, Huracán y Atlético Tucumán) pierdan.

Todo parece indicar que los cañones de Barros Schelotto apuntan a la Libertadores, competencia en las que mantiene las chances por sí mismo. El primer pasó es en el Cilindro de Avellaneda.