Godoy Cruz cayó goleado por 3-1 ante San Lorenzo en el estadio Ciudad de Lanús, en el partido correspondiente a los octavos de final de la Copa Argentina. Con este resultado, al Expreso se le escapó el único torneo en el que venía más o menos derecho.

Durante el desarrollo de la primera mitad, de inmediato se marcó la superioridad del elenco Cuervo. Si bien desde el arranque Méndez pedía presión en tres cuartos del terreno, el conjunto mendocino hizo caso omiso a las indicaciones y, totalmente desorientados, vieron como entre los jugadores de San Lorenzo anotaban el primer tanto a los once de la primera mitad.

Blanco, Blandi y Belluschi fueron el tridente que participó en la jugada que depositó la pelota en el pie de Cauteruccio que abrió el marcador.

Definitivamente caía un baldazo de agua helada. Abecasis descuidando su costado, un mediocampo muy poblado (desconocido planteo en la era Méndez, o al menos poco habitual) en quince minutos de juego, San Lorenzo ya era mucho más que el Tomba, que cinco minutos después veía como el marcador se ponía 2-0 con gol de Blanco con un cambio de frente de por medio y una excelente elaboración de la jugada.

La alegría cuerva se iba a esfumar al poco tiempo, con el gol de descuento de Ángel González. Silva puso un tremendo pase en profundidad, entró solito y solo Angelito que, con suspenso, anotó el descuento.

El gol mendocino de poco iba a servir y poca molestia iba a producirle el conjunto de Aguirre, que siguió enfocado en el juego y continuó su dominio hasta el final del primer tiempo.

La segunda mitad parecía en los papeles que fuera a ser más parejo pero no fue así. El equipo de Boedo salió al césped del Néstor Díaz Pérez de igual manera que concluyó la primera parte.

La otra cara de la moneda era el Expreso, que pese a la entrada de Ayoví en la delantera no iba a encontrarle el rumbo en lo que quedaba de juego y las ilusiones de acceder a los cuartos de Copa Argentina se esfumaban, a esta altura, bajo una lluvia fuerte.

Con el ingreso del ecuatoriano, el planteo volvía a ser 4-4-2 clásico del Gallego con menos volantes y dos puntas. Al tiempo, ingresó Correa por Silva volviendo el esquema 4-3-3.

Antes de eso, a los once minutos San Lorenzo engrosaba el tanteador con un gol de Belluschi de cachetada.

El partido fue transcurriendo y transitó hasta el final en una meseta. San Lorenzo había congelado el resultado y Godoy Cruz iba en busca del descuento con poco que perder pero sin ideas claras. Si a eso le sumamos las expulsiones de Viera y de Ayoví por dos patadas infantiles y dignas de un jugador amateur; el resultado le iba a quedar bien al partido.

Otra vez un Tomba sin ideas. Sin juego, con pocos momentos de futbol asociado entre los jugadores y sumido en las tinieblas de las dudas de aún no encontrarle la vuelta al equipo. Será cuestión de barajar y dar de nuevo, por enésima vez.