El partido de River ante Boca y los aspectos positivos pensado en los próximos clásicos

El Superclásico correspondiente a la Superliga Argentina terminó sin goles y sabiendo que en octubre llegan dos encuentros más, pero por Copa Libertadores, analizaremos que es lo positivo que se puede rescatar del funcionamiento de River Plate en función a esos encuentros.

El partido de River ante Boca y los aspectos positivos
pensado en los próximos clásicos

Ignacio Fernández encabeza el ataque de River ante Boca en el encuentro del último fin de semana. De fondo, Marcelo Gallardo observa. FOTO: Web

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Por Nicolás Kralj

XEl River Plate de Marcelo Gallardo tiene una característica sostenida a través del tiempo, intentar siempre ser el protagonista en cada partido, y el encuentro ante Boca Juniors no fue la excepción. Sin embargo, el esquema defensivo que presentó Gustavo Alfaro no permitió romper el cero en ninguno de los dos arcos. En vista de que falta menos de un mes para la disputa entre ambos correspondiente a la semifinal de Copa Libertadores, ¿Qué aspectos positivos de esta paridad puede rescatar Marcelo Gallardo?

El primer y más obvio aspecto positivo que se vio durante el encuentro es el juego. El Millonario demostró ser ampliamente superior al Xeneize en lo que a juego respecta, contando con la salida limpia desde sus defensores, los pases claros de sus mediocampistas, la velocidad de sus volantes ofensivos y las opciones de ataque que surgen de las constantes subidas de los laterales. Ciertamente lo que falló fueron las terminaciones en los pies de los delanteros, cuyo aspecto es el más letal del conjunto de Gallardo. Obviamente es algo a corregir, pero saber que sos superior en el resto del campo de juego, es sin duda un aspecto positivo.

El párrafo anterior, en donde se destaca el juego, tiene que ver con las transiciones y los mercados de pase, algo que, aunque pueda parecer negativo, casi no tienen movimiento en los últimos años de River. El conjunto de Marcelo Gallardo salvo mínimos movimientos, mantiene las bases, y esto es algo que permite cortar esas etapas de adaptación de jugadores que a veces tanto les cuesta los jugadores que llegan al fútbol argentino. En esto, la diferencia con Boca es abismal, ya que el equipo de la Ribera fue un tornado en cada mercado de pases de los últimos años, con muchísimas salidas y muchísimos jugadores nuevos, siendo casi incapaz de mantener un plantel.  Basta decir que, tomando como referencia los planteles titulares de la final de Madrid, River mantiene 9 de los 11 titulares mientras que Boca, de los 11 que salieron a jugar en el Bernabéu, solo 4 continúan en la institución e incluso su técnico, Guillermo Barros Schelotto, buscó nuevos desafíos en la MLS.

Ciertamente la actitud también juega y esto es algo que a River, hoy le sobra. Desde que Marcelo Gallardo se sentó en el banco de River, el club lleva una importante seguidilla de títulos, incluyendo algunas históricas como la Supercopa Argentina y la Copa Libertadores 2018, superando al eterno rival. Sumado que el conjunto Millonario no pierde hace 15 clásicos ante los grandes argentinos, la confianza del grupo es inmensa. Obviamente esto denota un trabajo impecable del cuerpo técnico, haciendo que cada jugador, habitual titular o habitual suplente, sepa que hacer en el momento que pisa el campo de juego. Esto se ve en cada partido que River disputa, donde, desde el primer minuto, sale a imponer condiciones.

Para finalizar, vale la pena destacar algo que puede ser positivo para Boca y, a su vez, jugarle en contra, la recuperación de sus lesionados. Alfaro no contó con Ábila, Salvio y  Zarate, tres jugadores de ataque que podrán estar en las semifinales. ¿Por qué esto puede ser positivo para River? Quizás, con estos nombres en la nómina, Boca decida jugar de igual a igual ante River y sabemos lo que puede llegar a pasar si algún equipo intenta esto, basta buscar la repetición de la fecha 3 de la Superliga, en donde Racing lo intentó y fue apabullado a domicilio. Lógicamente esto no es una verdad absoluta, pero basándose en los antecedentes de los últimos años, pocos equipos, por lo menos en América, se encuentran al nivel de River Plate.