Con un control absoluto del encuentro que no pudo ser reflejado apropiadamente en el resultado, el conjunto de Marcelo Gallardo obtuvo una firme victoria ante Godoy Cruz en el estadio Ciudad de Lanús. Tras el 1 a 0, resultado del autogol de Joaquín Varela, River Plate llegó a los cuartos de final del certamen nacional y aguarda por Almagro, verdugo de Boca en esta copa, o Talleres, quien venció por penales a Banfield minutos antes de que el partido entre Godoy Cruz y River comenzara.

El primer tiempo, de entretenido pasar, comenzó con ambos equipos prestándose el balón e incluso, antes de los 10 minutos ambos habían tenido oportunidades. River a través de una buena jugada combinada que finalizó con el remate de Borré, contenido por Mehring, mientras que Godoy Cruz había hecho lo suyo con un remate desde afuera del área en los pies de Breitenbruch, que fue contenido por Armani. Sin embargo, con el pasar de los minutos, River sacaba a relucir su mejor carta, el juego combinado en velocidad, lo que hizo que el cuadro mendocino se replegara y solo intentara atacar a través del contragolpe, siendo esta la imagen que mostrarían ambos hasta el final del encuentro.

El primer, y único gol del encuentro, llegaría a los 21 minutos. Tras un centro en una pelota parada realizado por Nacho Fernández, seria Joaquín Varela quien, en un intento de despeje, convertiría en su propia valla para darle el gol y la ventaja definitiva al Millonario. Así, el primer tiempo, terminaba sin cambios ni jugadas destacables. Aunque lo de River fue un monólogo, la ventaja no daba seguridades.

Para ser justos con la verdad, el complemento no contó con emociones. El partido, más allá de los cambios en ambos conjuntos, continuó con la dinámica ya vista. River dominaba, atacaba, pero no conseguía ser efectivo en los últimos metros. El Tomba defendía con todos sus jugadores y, a diferencia del primer tiempo, no encontró los espacios para generar contragolpes. Lo más destacable del segundo tiempo fue la doble amarilla y posterior expulsión de Cardona, algo que ni siquiera había notado el árbitro hasta el momento que fue alertado por Enzo Pérez.

Sin jugar mal pero sin brillar, River Plate superó un escalón más en la Copa Argentina y ya está en cuartos de final. El hincha se puede quedar tranquilo, Marcelo Gallardo y sus dirigidos pelean firmes en todos los frentes.

Resumen del juego