Federico Delbonis logró sin dudas el triunfó más importante de su carrera tenística y de la historia del Tenis argentino, tras vencer por 6-3, 6-4 y 6-2 a Ivo Karlovic en dos horas y 9 minutos dandóle el quinto punto a la Argentina y la tan ansiada Copa Davis por primera vez en su historia.
El argentino quién con una solidez intachable domino de prinipio a fin, despejando cualquier duda sobre su juego y una posible recuperación del croata que nunca llego. En el primer set, el oriundo de Azul, logró un quiebre de servicio que permitió llevarse con su saque el primer set por 6-3, con una izquierda poderosa un saque intachable, haciendóle frente a un potente saque como el del enorme croata de 2,11 Mts.
Delbo, con pelotas bajas que complicaban al lungo croata en sus subidas a la red y jugadas de ensueño, hicieron de este partido el deseado por cualquier equipo y por cualquier jugador a esta altura de la serie.
En un segundo set donde emuló muchas veces la calidad en el juego de otro zurdo como Rafael Nadal, hacía vibrar a cada persona y disfrutar de un gran partido de Tenis, acentuando estas bases, Fede logró quedarse por segunda vez en el partido con el saque de Karlovic y conseguía otro set tranquilo, y con gran efectividad en su servicio.
El tercer set se esperaba una reacción del jugador que representaba a Croacia que nunca se hizo presente, lejos de eso el visitante salió a terminar la historia y buscar lo que más tarde sería la primera Copa Davis para la Argentina. Logró obtener dos veces el servicio de su rival y dejo el marcador 5-2 para cerrar el partido con su saque. Así fue tras estar 40-0 erró la primera pelota de match, la cual se fue apenas larga. En el siguiente punto el que estaba sobrando era el croata, tiró una derecha larga por el fondo de la cancha y le dió la tan ansiada copa luego de 4 finales perdidas.
Así el equipo argentino no solo se quedó con la Copa, sino que formó un gran grupo que llevo a cada jugador a disputar diferentes puntos importantes en diferentes series, pero que todos pudieron aportar su granito de arena para coronar la Primera Copa Davis de la historia.