No en vano es el número 3 de todo el ránking ATP. Del Potro es uno de los mejores tenistas de la actualidad, sin discusión, y es argentino. Este martes por la tarde logró una victoria importantísima ante John Isner que lo posicionó en las semifinales de su “torneo favorito” según afirma el tandilense, y la segunda semifinal de un Grand Slam en 2018.

En un partido complicadísimo por las pésimas condiciones climáticas, el tenista argentino se terminó quedando con el marcador por (5)6-7, 6-3, 7-6(4) y 6-2, logrando algo que solo los tenistas de élite pueden hacer: quebrarle el servicio varias veces al gigante americano.

El encuentro entre las dos torres comenzó como se esperaba, saque y saque, palo y palo. Dos tenistas que no desaprovechan sus turnos de servicio y que no se regalan ante ninguna pelota. Solo hubo una situación de quiebre en el primer set pero fue aprovechada por Delpo, por tanto, se definió en un tie-break. Isner arrancó derecho en el desempate, pero Juan Martín nunca bajó la intensidad y todo se definió en un 7-5 en favor del local.

Para la segunda manga, La Torre de Tandil le encontró la vuelta a los saques de Isner y comenzó a aumentar su porcentaje de devoluciones. Tanto fue así que consiguió quebrarle el servicio a uno de los Top-20 que según la estadística tiene el 94,2% de games ganados con su servicio en las últimas 52 semanas. Solamente restó mantener la ventaja alcanzada para cerrar el segundo set con un 6-3. Isner venía de jugar dos partidos a cinco sets y uno a cuatro, y Juan Martín ya lo obligaba a disputar al menos un cuarto.

El tercer set fue muy similar al primero, con ambos bastante más cansados por el tiempo de juego y, sobre todo, por las altísimas temperaturas en la Gran Manzana. Sin embargo, ninguno perdió la cabeza y por el lado del argentino, mantuvo la misma intensidad que en el resto del partido, por eso terminó llevándose el desempate final por 7-4, tras lograr un par de mini quiebres en el último juego.

Previo a lo que sería el cuarto y último set, se cumplieron con las reglas del calor extremo. Ambos tenistas fueron a los vestuarios por 10 minutos, donde su pudieron duchar, cambiar el aire, la ropa empapada y volver con otra mentalidad a la pista. El hecho de estar tan cerca de lograr el tercer set en el tie-break y terminar perdiéndolo le jugó en contra al norteamericano, quien no pudo encontrar el eje en el set final. Del Potro volvió renovado, con más energías y enfrente tenía a un Isner que oponía una resistencia mínima. El argentino quebró rápidamente el servicio del rival y se puso 4-1 en cuestión de minutos. Devastado, Isner logró mantener una vez más su saque, pero en su último turno dejó pasar la oportunidad de seguir peleando hasta el final, y terminó cediendo por tercera vez su servicio ante Juan Martín, con un 6-2.

Del Potro alcanzó las semifinales del US Open por tercera vez en su carrera, y es la segunda vez en este año que llega a una instancia similar en uno de los cuatro grandes. Enfrente tendrá un tenista aparentemente invencible como Rafael Nadal, una revancha pendiente con la posibilidad de alcanzar nuevamente una final en New York; o por el otro lado, un desafío emocionante ante Dominic Thiem, tenista que no termina de cerrar su perfil sobre las canchas duras, y es el único que puede presumir de haberle ganado a Nadal esta temporada de polvo de ladrillo.