Los últimos dos campeones del mundo han quedado eliminados en fase de grupos, como el caso de Italia en Sudáfrica y España en Brasil.

La vigente defensora, Alemania, busca cortar esa maldición aunque con un peso en contra, al tener la necesidad de sumar de a tres frente a un duro rival nórdico que tiene menos presión y que tiene ya tres puntos en sus casillas.

La Maquinaria alemana se vio afectada cuando México atacaba a espaldas de sus volantes de primera línea, Kroos y Khedira eran constantemente presionados y atacados. A los delanteros Timo Werner y Muller, les llegaba poco el balón y México taponaba y a su vez, atacaba las bandas de Draxler y Muller y con un Ozil poco participativo en la generación.

En Europa, la prensa y la mayor parte de las leyendas del pasado como Lothar Matthäus o Stefan Effenberg, han criticado duramente al equipo, destacando sus lagunas tácticas y técnicas, así como la actitud del equipo que brilló hace 4 años en Brasil y que ahora parece lejos del nivel necesario para revalidar su corona.

Por el otro lado, los Ecandinavos llegan con mucha más confianza luego de ganarle por la mínima a Corea del Sur, además llegan con más posibilidades de acceder a la siguiente ronda, ya que un empate los dejaría muy bien posicionados.

Las estadísticas no ayudan mucho a los guerreros suecos, que hace 40 años no le ganan a Alemania, incluso ninguno de sus presentes jugadores había nacido.

En cuanto a bajas suecas, los defensores Filip Helander, Pontus Jansson y el centrocampista Marcus Rohden no viajaron a Sochi por problemas estomacales, tal y como confesó su entrenador. Sin ellos, Suecia tiene la oportunidad de hacer historia.

"Tenemos una presión enorme", confesó Müller en la rueda de prensa previa al partido. El goleador del Bayern de Múnich tendrá otra oportunidad para acercarse a Ronaldo y Miroslav Klose en la lista de goleadores históricos.