Entrevista en colaboración con: Juliana Florez Alfonso.

El esfuerzo, el sacrificio y el buen manejo del esférico, han llevado a la bogotana de 25 años a sobresalir en el balompié femenino. Dueña de goles, gambetas y aficionados al espectáculo tanto en su tierra natal como en el exterior. (Guía Daniela Figueroa.)

Así habló la volante embajadora para VAVEL Colombia.

Pregunta. ¿Qué es lo que más la emociona del fútbol?

Respuesta. Desde pequeña he practicado varios deportes pero me decidí por el fútbol, porque me da el espacio de ser libre y siento que es lo que compagina muy bien conmigo; no sé exactamente qué es lo que más me emociona, pero sí es lo que más disfruto hacer.

P. ¿El gol y partido más especial, los que recordará siempre?

R. En México, con la universidad. Recuerdo una final en especial que estaba lesionada, tenía un desgarre y aun así jugué todo el partido, dejé la vida entera, terminó el partido y ya no podía caminar más, pero fuimos campeonas y valió cada segundo.

El gol que recuerdo mucho fue el que marqué con Millonarios ante Fortaleza, fue mi primer gol como profesional y fue especial.

P. ¿Qué tan lejano ve el alcanzar igualdad plena entre hombres y mujeres, en cuestión de fútbol?

R. Lo veo muy lejos, evidentemente el recorrido que lleva el fútbol masculino es de muchísimas décadas y esperamos no tener que tardar tanto tiempo para llegar a lo mismo. Nosotras no pedimos una equidad en salarios, pero si fútbol, queremos jugar todo el año. Lo deseo muy pronto, pero vamos paso a paso, de pronto no lo aprovecharemos nosotras, pero si las generaciones que vienen atrás.

P. ¿Cómo consiguió compaginar el deporte y los estudios, y por qué decidió optar por el fútbol como tu profesión definitiva?

R. Nunca ha sido una opción dejar el fútbol, todo lo que busco hacer en mi vida tiene que ver con esto, que estudie algo que me guste, pero que sea jugando fútbol porque es realmente lo que me hace feliz. La vida estudiantil es dura, pero en la universidad donde estudié ayudan mucho para manejar tus horarios y los profesores son conscientes de que eres deportista. La vida universitaria es una de las mejores experiencias que he vivido.

P. Cada vez son más las mujeres que practican fútbol. Sin embargo, siguen existiendo prejuicios y estereotipos ¿usted cree que es así? ¿Se ha ido modificando? ¿Cómo fue en su caso?

R. En mi caso me tocó muy duro porque siempre jugué con niños. Los papas de ellos se reían de mí, pero ya cuando yo le quitaba el balón a sus hijos, se ponían rudos y ya era algo por género y no por talento. Jugué con niños en la Liga Bogotá y eran partidos intensos. Hoy en día si ha bajado mucho el tema de los comentarios y es mucha la cantidad de niñas que están empezando y lo hacen muy bien, hay mucho talento.

P. ¿En que sector de la cancha se siente más cómoda, y cuáles son sus características como jugadora?

R. Soy totalmente ofensiva, genero mas de lo que recupero, pero mi posesión siempre ha sido volante de creación, estar siempre donde se ubica el balón. Generar pases y jugadas de gol es lo que siempre se me ha dado mejor.

P.¿Cree que el fútbol femenino en Colombia ya ha hecho lo suficiente para demostrar que no es solo de hombres?

R. Se ha demostrado que los equipos están hechos para grandes cosas, se han llenado los estadios en las finales. Es un mensaje de que hay talento y la gente lo apoya.

P. ¿Quién fue su inspiración para ser una jugadora de fútbol?

R. Mis papas siempre me han apoyado, me han ayudado a cumplir mis sueños. Son mi mayor motivación. Y a nivel deportivo, siempre he visto a Marta y Alex Morgan, las admiro mucho.

P. Sabemos que jugó en Estados Unidos, ¿allá las futbolistas tienen los mismos privilegios que los futbolistas?

R. Se está luchando por la igualdad en los pagos, sin embargo, la cuestión de apoyo es diferente. Las universidades apoyan mucho al deporte, y eso los hace ir un paso adelante.

P. ¿Cree que el fútbol le ha forjado un carácter que la ayuda a manejar los casos de su vida exterior?

R. El fútbol me ha ayudado a madurar en distintos aspectos, eso sirve en la vida cotidiana. Por el fútbol me fui de mi casa, y en la cancha he tenido que ser muy fuerte, eso me ha servido en cualquier situación de mi vida personal.