Baloncesto Sevilla ganó un partido vital en sus aspiraciones de respirar con tranquilidad durante la Navidad. La victoria coloca a la escuadra verdirroja con un balance de 5-7, ocupando la decimotercera posición en la Liga Endesa empatado a victorias con el octavo clasificado, lo que refleja la igualdad máxima en la zona media en el presente ejercicio. Más allá de la euforia, el objetivo es la salvación, meta que se prelude con optimismo al tener tres partidos de ventaja con Movistar Estudiantes, equipo que limita la zona de descenso y que será el próximo rival de los pupilos de Luis Casimiro.
El preparador del conjunto hispalense atendió a la prensa con un rostro feliz después de que su cuerpo consiguiera neutralizar las pulsaciones provocadas por el intenso partido: "Lo fundamental de hoy ha sido la defensa del segundo cuarto. Hemos crecido a partir de ahí cambiando el signo del partido". El míster hispalense destacó la actuación de Miljenovic y no estuvo especialmente halagador con Anderson, pues piensa que "aún es pronto para valorarlo. Es Navidad y hay que tener paciencia". También fue cuestionado sobre las desconexiones que sufre el equipo y que como resultado dan vida al rival: "Había jugadores muy cansados y lo hemos notado al final".
Sobre la lesión de Bamforth y la evolución de Henton, destacó que "Scott va acortando plazos, pero lo veo complicado para el domingo. Es una lesión que hay que tratar con cautela. Henton es un trabajador incansable, con buena mano y que ahora está demostrando su calidad". Finalmente, Casimiro destacó el récord de diez asistencias de Berni y el futuro del equipo: "Berni es campeón del mundo y será por algo. 26 asistencias en tres partidos son un disparate. El equipo crece día a día y eso es lo que más me satisface".