El Herbalife Gran Canaria cierra un 2015 lleno de alegrías, mezcladas con alguna que otra decepción en cualquier caso menor, que le ha convertido en uno de los equipos más a tener en cuenta de toda la Liga Endesa. La del curso pasado fue una de esas temporadas de las que se denominan históricas, una de las mejores en la corta historia de la entidad claretiana desde su fundación allá por el año 1963. Con una participación no tan fructífera en la ACB, donde los insulares quedaron en octavo puesto pero consiguiendo acceder finalmente a los playoff,  los pupilos de Aíto García Reneses firmaron una Eurocup inmaculada, llegando a disputarse el título en una más que complicada final ante todo un Khimki de Moscú.

Y eso que no empezó bien el año, con la decepcionante participación del club insular en la Copa del Rey disputada en Gran Canaria en el pasado mes de febrero. Una primera parte del año muy irregular y que se caracterizó, sobre todo, por un equipo desarmado que no llegó a interiorizar la propuesta del nuevo entrenador, Aíto García Reneses.

El duro golpe de la Copa del Rey

Aunque estaba clara la participación del conjunto grancanario en la Copa del Rey al ser el anfitrión del torneo, el equipo amarillo quería entrar por la puerta grande, es decir, clasificándose también por puesto en la tabla clasificatoria. Con mucho sufrimiento, se logró la participación in extremis en la séptima posición de la clasificación y, por tanto, como equipo no cabeza de serie.

El FIATC Joventut apeó al Herbalife de su Copa del Rey | Fotografía: ACB
El FIATC Joventut apeó al Herbalife de su Copa del Rey | Fotografía: ACB

El rival que le tocó al ‘Granca’ no fue excesivamente complicado para los intereses amarillos, el FIATC Joventut, pero no se supo dar la cara en la primera ronda y, con un resultado de 67-74, se despidió de su Copa del Rey. Una gran decepción para la afición y los jugadores y cuerpo técnico, que esperaban poder aprovechar el factor cancha para llegar, incluso, a una hipotética final. Pero ni siquiera se disputó el primer partido, que dejaron franco para los verdinegros.

Más altibajos pero se logró el objetivo final: jugar los playoffs

Gracias a la diferencia de puntos, el Herbalife Gran Canaria consiguió hacerse con la última plaza que daba derecho a jugar los playoffs por el título de la liga Endesa. El equipo de Aíto se complicó la vida hasta el final, con una derrota en Madrid en la última jornada de la competición frente al Estudiantes, que marchaba en la 13ª posición sin aspiraciones a disputar la lucha por el título.

El ‘Granca’ fue muy irregular, pero logró algunas importantes victorias que le facilitaron estar en esa ronda final, como la conseguida contra el CAI Zaragoza, su máximo rival por la octava plaza, o el Valencia Basket, ambas en el GC Arena. Pero también sufrió inesperadas derrotas como las encajadas contra el Iberostar Tenerife en el Santiago Martín o contra UCAM Murcia en el feudo de Siete Palmas.

Se venció a Valencia Basket o CAI Zaragoza en casa

Con todo, se logró la meritoria clasificación, la cual sirvió para que el conjunto canario se viera las caras con el coco, el Real Madrid. El equipo de Laso pasó por encima de los amarillos y, con un rápido 2-0, los mandó de vuelta a Gran Canaria. En el primer partido en Madrid, los blancos aplastaron al ‘Granca’ con un resultado contundente: 101-74, el más abultado de toda la ronda; mientras que en la isla, se deshicieron de los canarios por un mucho más ajustado 86-93.

En ese momento, se acabó el curso 2014/2015 para el Herbalife Gran Canaria, con un balance de 18 victorias y 16 derrotas, y muy lejos del nivel mostrado en el último año de Pedro Martínez al frente de la escuadra grancanaria.

La Eurocup como bálsamo

El ‘Granca’ hizo historia el año pasado, sí. El mayor éxito de su corta existencia lo logró en la temporada 14/15, en la que portó y defendió el nombre de la isla de Gran Canaria, y de todo el archipiélago, por toda Europa, haciendo soñar a sus aficionados, y a los que no lo eran también, hasta límites insospechados.  La llegada de Aíto García Reneses a la disciplina insular en el verano de 2014 concluyó con una campaña de auténtico récord: de los 24 encuentros que se disputaron en la Eurocup, 21 acabaron en victoria para los amarillos. Una racha envidiable que llevó en volandas a los jugadores dirigidos por el técnico madrileño hasta una antológica final jugada a doble partido en los últimos días del mes de abril. Pero en frente tenía al Khimki de Moscú, conjunto que destaca por ser mucho más habitual en la Euroliga, uno de los cocos de la competición en ese curso.

21 victorias logró el Herbalife en la pasada Eurocup

Tras una gran primera ronda del torneo continental, el Herbalife Gran Canaria, junto con el Lokomotiv Kuban Krasnodar, fueron los únicos en acceder a la siguiente ronda imbatidos y como teóricos favoritos.

En esa fase previa a las eliminatorias, los grancanarios quedaron emparejados contra tres equipos asequibles como eran el Dinamo Banco di Sardegna Sassari, recientemente apeado de la Euroliga (eso sí, en un grupo complejo en el que se hallaban el Real Madrid, el Anadolu Efes o el Zalgiris Kaunas, entre otros); el Banvit Bandirma turco, y el humilde, pero incontestable en su región, KK Buducnost Podgorica montenegrino. Una única derrota, ante los otomanos, sufrirían los de Aíto en las seis citas que afrontaron y que les posibilitaron, a su vez, jugar el encuentro de vuelta en cancha propia en los octavos de final, una ventaja añadida. Comenzaba el todo o nada. Una derrota en el encuentro de ida en dicha eliminatoria podía suponer una losa difícil de superar para el ‘Granca’. El Cedevita esperaba en Zagreb.

Y de Zagreb se trajo la victoria el Herbalife. Un gran triunfo trabajado en conjunto, en el que sobresalió Brad Newley con 16 puntos, ponía a los de Aíto con pie y medio en los cuartos de final (76-84). La vuelta, disputada en el Gran Canaria Arena el 11 de marzo, se saldó con una sufrida victoria (75-72), pero que permitía a la entidad grancanaria seguir haciendo historia.

El Pinar Karsikaya Izmir aguardaba en cuartos de final, conjunto que solo había perdido dos ocasiones en todo el curso en feudo propio. Pero las primeras fuerzas había que dirimirlas en territorio afortunado, en casa y ante la fiel, pero también pasional, afición insular. Un intratable Albert Oliver, con 17 puntos (cuatro de cinco en tiros de dos y tres de siete en tiros desde más allá de la línea de 6.75) lideraría un nuevo triunfo para el Herbalife (76-66) que allanaba un poco más el terreno hacia la disputa de las semifinales.

El Granca se deshizo de equipos como el Cedevita croata, el Pinar Karsikaya turco o el Unics Kazan turco

Un segundo cuarto trascendental en el partido de vuelta (74-75) hizo que los amarillos asaltasen el “infierno turco” y lograsen una clasificación histórica a la siguiente eliminatoria, aunque la historia, el milagro, el logro ya se había alcanzado tiempo atrás.

Solo un escollo más y el Herbalife ya podría tener su ansiada final.  Ese escollo tendría nacionalidad rusa, el Unics Kazan. El conjunto, también procedente de la ya mencionada Euroliga, venía de realizar una auténtica machada al remontar un marcador adverso en los cuartos de final ante otro club ruso, el Lokomotiv Kuban Krasnodar. Salieron derrotados del Basket-Hall-Arena por 78-87, teniendo que jugarse la clasificación, pues, fuera de su cancha. Pero no escatimarían en esfuerzos y vencieron en Kasnodar por 58 a 79.

La historia amarilla continuaba en Rusia. Guiados por Newley y por Walter Tavares en la ida, y por Kendall y Kuric en la vuelta, los isleños consiguieron el premio a toda una temporada de esfuerzo, lucha y garra conjunta, alcanzando la merecidísima final en la edición 14/15 de Eurocup.

El Khimki moscovita esperaba en la final. Una plantilla que ya sabía lo que era ganar este torneo, allá por el año 2012 en el que vencieron a un equipo precisamente español, el Valencia Basket (77-68).

Pero los rusos despertaron del sueño al Herbalife sin miramientos, con dos claras victorias en Las Palmas de Gran Canaria (66-91) y en Moscú (83-64). Los Petteri Koponen, Tyrese Rice, Egor Vyaltsev, Davis Paul y compañía fueron demasiado para los claretianos.

El Khimki despertó al 'Granca' del sueño europeo | Fotografía: CB Gran Canaria
El Khimki despertó al 'Granca' del sueño europeo | Fotografía: Eurocup

Pero, a pesar de la derrota en el encuentro definitivo, la participación en la Eurocup no pudo ser más exitosa. El Club Baloncesto Gran Canaria simplemente disfrutó de la competición, se divirtieron como niños en su infancia cuando lo único que tienen en mente es la felicidad y la inocencia, pero a la vez lucharon, compitieron y nunca tiraron la toalla ante todas las situaciones que se les presentaron a lo largo del torneo. El ‘Granca’ no ganó el título oficial de la Eurocup, pero hacía ya tiempo que había ganado su particular ‘Eurocup’: la de la ilusión

Un quinteto inicial renovado en verano

Tras el final de una temporada inolvidable en la entidad claretiana, llegó un verano en el que, como es habitual en el período de transición de un curso deportivo a otro, se produjeron una gran cantidad de salidas y llegadas en el club. Se marcharon jugadores emblemáticos e históricos del conjunto amarillo que decidieron emprender una nueva etapa en sus carreras, y otros que estuvieron en el mismo temporalmente pero a los que se les agradeció, igualmente, su esfuerzo y compromiso. Mientras,  también llegaron viejos conocidos, viejas leyendas, además de otros hombres que arribaron a Gran Canaria para poder convertirse, por qué no, en futuros símbolos.

Salidas de jugadores como la del base madrileño Tomás Bellas, leyenda viva del Herbalife. Nada más y nada menos que seis años (del 2009 al 2015) duró su estancia en el archipiélago, donde fue uno de los auténticos líderes del ‘Granca’, uno de sus mejores jugadores, no solo por sus ya conocidas y constatadas calidad y técnica (mítico fue su partido en abril del año 2013 cuando firmó su mejor actuación en la ACB con 31 puntos y cinco asistencias. En total, 38 puntos de valoración) sino por su personalidad, su humildad y por ser un ejemplo de la deportividad y el respeto en el mundo del baloncesto. Su último año como jugador amarillo, como no podía ser de otra manera, lo ejerció como capitán del equipo. Ya en verano fue conocida su marcha al CAI Zaragoza con el objetivo de iniciar una nueva etapa en su dilatada trayectoria como profesional, marcha que toda la afición isleña lloró. En su vuelta al Gran Canaria Arena esta temporada fue vitoreado y recibido como un héroe.

Otro de los hombres más destacados en los cursos más recientes del club grancanario, Walter Samuel Tavares, la torre caboverdiana,  decidió emanciparse de la vida paradisíaca característica del archipiélago y emprender un largo pero merecido viaje a los Estados Unidos, en concreto a la ciudad de Atlanta, Georgia, a la disciplina de los Hawks. Quién iba a decir que ese chaval de 17 años que no había jugado en su vida al baloncesto y que fue recabado por la entidad claretiana en el año 2009 iba a poder afirmar, seis años después, y tras pasar incluso por el desaparecido UBE La Palma, que estaría jugando en la NBA.

Puede que estas fueran las dos salidas más significativas, pero no las únicas. Otros integrantes de la histórica plantilla del curso 14/15 del Herbalife también abandonaron la isla hacia otros equipos, como es el caso de Ian O’Leary. El ala-pívot con doble nacionalidad irlandesa-estadounidense no quiso alejarse mucho de Gran Canaria y, tras dos años en la misma, arribaría a la isla de al lado para ser pieza importante en el proyecto del CB Canarias, donde se encontró con otras caras conocidas como la del alero madrileño Javier Beirán o la de Xavi Rey (ahora en Estudiantes). Al igual que él, otras incorporaciones temporales, pero no menos productivas y fructíferas, del club canario como las de Luca Vitali, Txemi Urtasun o Levon Kendall también decidieron rescindir la unión contractual que tenían con el mismo, como también ocurrió con el canterano Óscar Alvarado.

Tras la marcha de importantes jugadores, el 'Granca' tuvo que reinventarse

Pero también llegaron a una de las islas afortunadas hombres como Kevin Pangos, base canadiense pero también con nacionalidad eslovena considerado como uno de los jugadores con mayor proyección del baloncesto continental. El formado en la Universidad de Gonzaga se está convirtiendo en uno de los miembros más destacados, sino en el más destacado, del equipo dirigido por Aíto: cada partido suyo es una auténtica exhibición y, tras la baja de Kyle Kuric, es, en la mayoría de los partidos, el máximo anotador de la plantilla y uno de los principales a la hora de tirar del carro.

Otro como Alen Omic ha dejado a las claras que será pieza fundamental en los esquemas del veterano preparador madrileño: ambición, dureza, potencial, pasión, carisma y aportación considerable, tanto ofensiva como defensivamente por parte del pívot nacionalizado esloveno y procedente del Union Olimpija, son los diferentes aspectos que pueden contribuir a que el ‘Granca’ consiga otra temporada de ensueño.

Para seguir reforzando el juego interior del conjunto grancanario, Miguelo Betancor también consiguió fichar a todo un internacional con la selección absoluta española en la pasada Eurocopa de Francia: Pablo Aguilar. El granadino rescindió su contrato en el mes de junio con el Valencia Basket y, buscando nuevos retos, no vio con malos ojos pasar al menos una temporada en el conjunto claretiano.

Otros como Xavi Rabaseda y Ovidijus Galdikas dan esa frescura y juventud tan necesarias en el equipo junto con otros compañeros como los propios Pangos y Omic y Oriol Paulí.

Y como no, la vuelta de Sitapha Savané, símbolo y mito no solo del Club Baloncesto Gran Canaria sino de la Liga Endesa. En este mercado estival, se daba a conocer una de las principales noticias en la disciplina amarilla, el regreso de ‘Taph’, que, a pesar de poder hallarse en sus últimos años como destacado jugador y pívot profesional, no dudará en tirar en todo momento de su veteranía, experiencia, liderazgo y personalidad. 

Savané, uno de los grandes fichajes del periodo estival | Fotografía: VAVEL
Savané, uno de los grandes fichajes del periodo estival | Fotografía: VAVEL

Un inicio de temporada prometedor

Con la llegada de un nuevo bloque de jugadores, el Herbalife Gran Canaria comenzó su andadura en la temporada 2015/2016 con la disputa de la Supercopa Endesa. En un torneo menor en el que los participantes no muestran todavía todas sus cartas, un gran FC Barcelona Lassa arroyó al conjunto de Aíto en las semifinales. Sin embargo, y a pesar de la decepción por la contundente derrota, el cuerpo técnico no se alarmó demasiado, y como se vería más adelante, hicieron bien en no preocuparse.

El ‘Granca’ comenzó su segundo año consecutivo con carga de partidos en dos competiciones simultáneas de la mejor manera posible. Con importantes victorias tanto en Liga Endesa como en Eurocup, el conjunto canario ha venido, poco a poco, convirtiéndose en un rival a tener en cuenta. Su solidez defensiva ha hecho que solo cuatro equipos esta temporada le hayan endosado más de 80 puntos: el Barcelona en la Supercopa, el MHP Riesen Ludwigsburg en Eurocup, y el Real Madrid y el MoraBanc Andorra (que necesitó de una prórroga) en la Liga Endesa.

La llegada de Pangos u Omic han aportado un plus al equipo

Además, el trabajo que están llevando a cabo jugadores como Kevin Pangos o Alen Omic, que han llegado este mismo verano a Gran Canaria, está ayudando al club claretiano a ir cumpliendo los objetivos marcados. Con la clasificación para la Copa del Rey muy encaminada a día de hoy y la clasificación al Last 32 de la competición continental ya en el bolsillo, el ‘Granca’ está demostrando que puede competir por algo más que una mera clasificación.

Las cosas marchaban a las mil maravillas, el Gran Canaria llegó a ser líder de la Liga Endesa y de la Eurocup al mismo tiempo, algo que no había ocurrido en toda la historia del club. Sin embargo, una estrella perdió brillo. Tras un partido en el que el ‘Granca’ cayó derrotado ante el Laboral Kutxa, la familia grancanaria se encogió con las noticias que llegaban desde la ciudad condal, donde el escolta Kyle Kuric acudió al médico para una revisión por sus migrañas. El jugador amarillo, uno de los mejores en el inmaculado inicio liguero del conjunto, tendría que ser operado para extirparle un tumor cerebral.

La baja del escolta fue un duro golpe para toda la plantilla, para el cuerpo técnico y para la afición. El siguiente partido, correspondiente a la Eurocup, también se saldó con derrota. Las mentes no estaban puestas en el parqué, sino en una clínica de Barcelona. Con todo, el Herbalife se fue recuperando, al menos en sus partidos en casa. Y es que, tras ese gran arranque de curso, el ‘Granca’ empezó a sentirse muy incómodo en los partidos lejos del Gran Canaria Arena.

El problema de ganar fuera de casa y la llegada de Seeley

Por ello, se hizo imprescindible ganar a domicilio. Una meta que, a pesar de que pudiera resultar sencilla, no lo fue en absoluto. Cinco partidos tuvo que esperar el equipo de Aíto para obtener la ansiada victoria lejos de suelo grancanario, concretamente en Italia ante el Enel Brindisi en la octava jornada de la Eurocup. En este partido, Sasu Salin se disfrazó de Kuric y, con 21 puntos, lideró la reacción amarilla.

Ese mismo día, se hacía oficial la llegada de DJ Seeley, que se encargaría de sustituir a Kyle hasta que este estuviera mejor de sus dolencias. Seeley, que no ha terminado de estar al nivel exigido por Aíto, no lo ha hecho mal desde que llegara, obteniendo los siguientes guarismos: 5’8 puntos, 0’8 asistencias y 0’8 rebotes por partido.

DJ Seeley ha aportado 5'8 puntos y 0'8 asistencias en sus cinco primeros partidos

Con numerosos altibajos en sus últimos enfrentamientos, el ‘Granca’ ha ido al ritmo de una victoria y una derrota en la competición doméstica. Mientras, sanaba sus heridas con grandes actuaciones en la competición continental: victorias ante el Alba Berlin y el Bon Reggio Emilia. Eso sí, el ‘Granca’ ya se ha enfrentado, en este final de año 2015, a los “cocos” de la competición: el Valencia Basket, el Laboral Kutxa o el Real Madrid ya han recibido, en sus respectivos feudos, al conjunto insular que, a pesar de luchar mucho, no ha conseguido sacar ninguno de estos enfrentamientos.

El último partido del presente año, disputado en el principado pirenaico de Andorra, no ha favorecido a darle la bienvenida al 2016 con buen sabor de boca. El MoraBanc se deshizo, en una prórroga bastante mala del cuadro de Aíto, del Herbalife por un resultado de 85-77, un resultado que mostró la cantidad de sube y bajas en el juego amarillo. Fue un golpe para la afición, que había salido encantada del partido anterior contra el Unicaja. En aquella cita, el ‘Granca’ se engrandeció para superar a un rival directo como es el club de la Costa del Sol, superando, a su vez, varios hitos en la historia del  club.

El Granca logró varios hitos en su victoria contra Unicaja | Fotografía: ACB
El Granca logró varios hitos en su victoria contra Unicaja | Fotografía: ACB

Habrá que ver si el próximo año 2016 es más prolífico para el conjunto canario. De momento, la clasificación a la Copa del Rey está muy avanzada, mientras que en Eurocup se han hecho muy bien las cosas. Los objetivos para Aíto siguen siendo los mismos: cuajar una gran actuación en la Liga Endesa que lleve al conjunto a pelear por entrar tanto en la Copa del Rey como en los playoffs por el título liguero. Dentro de ellos, se espera que el ‘Granca’ dé, por fin, ese salto de calidad que le lleve a disputar las semifinales de los torneos, tal y como sucedió en el último año de Pedro Martínez.

Por su parte, en la Eurocup la afición espera, con ansias, que el conjunto canario vuelva a disputar la final del torneo, al igual que el año pasado. Aunque este año la competencia es mucho más feroz, sobre todo con un Valencia inconmensurable que no ha perdido ningún partido en lo que va de curso baloncestístico. Sin embargo, este Herbalife es capaz de todo