John Wall ha aniquilado a los Atlanta Hawks. Tras una serie perfecta, con un doble doble de media(27/10.8) esta madrugada se ha postrado en el altar de los más grandes, los más decisivos, los mejores. Qué partidazo nos ha regalado. Su secuencia de tiro ha sido perfecta con un 16/25(64%) y de todos los colores. Tras penetración, tiro de media distancia, contragolpe... Un arsenal ofensivo que, además, lo ha sacado a relucir en los momentos más importantes para su equipo. CUando más apretaban los Hawks seimpre estaba él. Él era el factor X en este partido.

Visto para sentencia

El inicio del partido para los Wizards era perfecto. Acierto, línea defensiva agresiva y podiendo correr. Los de Scott Brooks se encontraban cómodos, a pesar de las tempraneras faltas de Gortat- que ha estado muy, muy mal- y la conexión de un Howard que ha parecido jugar solo un cuarto en el que ha firmado 9 puntos y 5 rebotes. Pero siempre estaban Wall y un gran Bradley Beal, que quiere ser uno de los grandes escoltas de la NBA. Sus tranisciones eran mortales, hasta el punto que al término de la primera mitad los Wizars ganaban con una cómoda ventaja de 19 puntos y un  24-4 a favor en puntos de contragolpe. Cada pérdida era puro veneno para los de Budenholzer, que no podían frenar al huracán Wall, que rebentaba los espacios con su potencia, siempre agresivo e inteligente en la toma de decisiones. Así era imposible.

Además, el acierto en el tiro de tres(8/13) ponía muy difícil las aspiraciones de los Hawks, comandados por Millsap, que se le notaba picado con Morris por su conocido pique y a Schroder, que llevaba la manija del ataque.  El desacierto de Hardaway JR les obligaba a relantizar el ritmo de ataque, puesto que sabían que cada balón suelto sería castigado por una transición de Wall y cía. Ataques de, incluso, 4-5 segundos. LLevando el concepto de D'Antoni al límite.

La reacción llegó tras el descanso

Tras el descanso, el acierto cayó del lado de los Atltanta Hawks, que lograron imponer su juego, con un gran Millsap y un acertado Schroder. Parcial de 25-9 y un 100-97 después de ir perdiendo por 21 puntos. Querían emular la- casi- remontada de los Milwaukee Bucks la noche anterior, pero se quedó en eso. En una casi remontada. La precipitación de los Hawks en los últimos minutos, queriendo jugar el séptimo partido antes de haber ganado el sexto les llevó al precipicio y allí estaba Wall para empujarlos. En cada jugada contestaba con una canasta más inverosímil, más espectacular. Él contra los Hawks y el público, que a  lo largo del partido lo abucheó y terminó callándolos con una exhibición para la historia. El pirmer jugador de la historia de los Wizards que cierra una eliminatoria con más de 40 puntos, el primero en toda la NBA desde Wade en 2012. Ahora sí que ya no hay debate, Wall ya es uno de los mejores.

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Sobre el autor
Albert Blaya Sensat
Estudiante de periodismo. De la generación del 98. Lector, escritor y ferviente amante del futbol y la NBA.