Jaime Fernández, al contrario que muchos jóvenes españoles, se emancipó pronto. Con 24 años emprendió una nueva aventura. Pese a su corta edad, disputó hasta siete temporadas con el equipo ACB de Movistar Estudiantes, y nueve en total con el club madrileño.

Salió del nido, de su confort particular para buscar un nuevo reto. El Andorra de Eurocup y su inigualable nivel de vida terminaron por convencer a Jaime tras un verano convulso. No mereció salir de la forma en la que lo hizo, con parte de la afición enfrentada y amenazas de demandas de su representante de por medio. Mucho ruido para el que fue el último ídolo de la Demencia. Queda en el aire, por tanto, el recibimiento de su ex afición el domingo (12:30) en el Wizink Center. No obstante, todo parece indicar que la tensión veraniega ha pasado y el reconocimiento positivo a Jaime Fernández será mayoritario. Al fin y al cabo, se entiende su deseo de marchar y buscar proyectos de mayor índole. Y, por otro lado, no ha transitado el puente Estu-Real Madrid como otros antes, lo que apacigua bastante la cuestión, para qué engañarnos.

Llega a la que fue su ciudad en el mejor momento de su carrera. Eso sí es algo habitual entre los ex colegiales. Que metan 20 puntos o más a su anterior equipo, también. Y es que si en el Estudiantes tuvo una progresión lenta pero ascendente (7,9 puntos y 7,8 de valoración la pasada temporada), en Morabanc Andorra ha explotado como jugador consagrado de Liga Endesa. 12.8 puntos y 4.3 asistencias y 13,8 de valoración le contemplan. Es un fijo para Joan Peñarroya y también para Scariolo en las ventanas FIBA.

En una entrevista con Ignacio Ojeda (PoblaFM), Jaime apunta a la confianza de su entrenador como factor fundamental de su gran estado de forma: "No atravesé un momento bueno al principio de temporada y ya estaba yo con mis comidas de cabeza, con mis dudas de no saber si valía para jugar de base... y en cuanto Joan me vio que andaba un poco dudando y tal vino a hablar conmigo. Me dijo que no pasaba nada, que él no dudaba, que estaba en Andorra para jugar de base, que sabía que no iba a ser fácil desde el inicio,... y ese momento fue un punto de inflexión, otros años no me ha pasado esto y me he tenido que buscar la vida. Peñarroya me ha ayudado mucho y me ha dado mucha confianza".

Fernández tuvo palabras para el Estudiantes, claro: "se echa de menos. Echo de menos mi casa, el club, su gente,... estuve mucho tiempo allí y me han tratado genial siempre. Lo echo de menos, pero estoy bien aquí. Lo que hice fue por una razón, ahora la estoy viviendo y estoy satisfecho. Pero claro que lo echo de menos, pero es cierto que cada día estoy más cómodo aquí".

Por último, sobre el recibimiento de la afición el domingo, el ex capitán del Estudiantes le resta importancia:" Se ha calmado todo, no sé qué recibimiento me darán. Me habría gustado salir mucho más fácil, pero no me abrieron las puertas y todo fue muy difícil. Espero llegar allí, tengo ganas de ver a todo el mundo. Si me reciben bien será increíble, y si no,.. estoy muy tranquilo de lo que he hecho por el Estu, siempre he puesto al club por delante. Cuando he tenido que jugar de base, pues base; si tenía que ser escolta; escolta; si tenia que defender porque teníamos al máximo anotador, defendía. Lo he dado todo siempre y si se sabe valorar genial, el que no.. así es la vida. Estoy muy tranquilo".

Movistar Estudiantes ha publicado el siguiente vídeo con respecto a la vuelta de Jaime Fernández a Madrid.