Salvados por el Coronavirus. Suena fuerte y también es “triste”, tal y como ha manifestado su presidente, José Quintana. Pero lo cierto es que es así, el Montakit Fuenlabrada se ha salvado principalmente, porque la temporada no se ha podido completar. 

Hasta el día 2 de abril, fecha en la competición se para indefinidamente, el Fuenlabrada marchaba penúltimo en la clasificación, con un balance de solo 5 victorias y 17 derrotas. A 2 victorias de salir del descenso con 11 jornadas por disputarse. 

Tal y como se estaban dando los resultados, parecía difícil que el Fuenlabrada pudiera salvarse, pero el pasado 20 de abril, la ACB emitió un comunicado anunciando la nueva ruta a seguir en caso de poder reanudar la competición. En esta, se daba por finalizada la Liga Regular sin descensos, de forma que el Fuenlabrada se aseguraba la permanencia. “La decisión de la ACB nos da certidumbre”,reconocía Quintana, que seguro respiró de alivio, aunque “tristes” por la situación, tal y como él mismo declaró. 

  • Primer año sin Popovic 

El Montakit Fuenlabrada encaraba su primera temporada Post-Popovic con el presupuesto justo para intentar luchar por la permanencia, y tras dos primeros meses ilusionantes, parecía que esta vez lo iban a conseguir sin mayor sufrimiento. Pero nada más lejos de la realidad. 

Marko Popovic entrando a canasta | Foto: VAVEL (Daniel Nieto)
Marko Popovic entrando a canasta | Foto: VAVEL (Daniel Nieto)

Una racha de 10 derrotas consecutivas, dejó a los madrileños hundidos en lo más bajo de la clasificación y con la sensación de que sería imposible salir de ahí. Hasta que llegó el parón. 

Tras el cambio de entrenador, el equipo experimentó cierta mejoría y a eso es a lo que debe agarrarse Fuenlabrada de cara al futuro más próximo.

Ahora, con la permanencia ya asegurada, es hora de trabajar ya en la próxima campaña con la mente puesta en la permanencia. 

  • Un inicio esperanzador

No fue un verano fácil para Montakit Fuenlabrada. Tras una temporada llena de irregularidades en la que acabaron decidiendo su salvación prácticamente a falta de dos jornadas, tuvieron que decir adiós a uno de sus jugadores más queridos: Marko Popovic, capitán y uno de los referentes durante los últimos años. 

Tanto Popovic como Ian O'Leary anunciaron su retirada del baloncesto. Además, también se marchaba uno de sus mejores anotadores, Pako Cruz y hombres que eran clave como Luka Rupnik o Chema González. 

Por ello, el reto de confeccionar la nueva plantilla era mayúsculo. Y el reducido presupuesto aún lo hacía más difícil. Consiguieron reforzar aquellas posiciones en las que más flaquearon la pasada campaña, aunque con jugadores que acumulaban poca experiencia. Y así, afrontaban la temporada 2019-20 con el difícil y siempre exigente reto de la permanencia. 

La pretemporada fue desilusionante. Todo derrotas. Y para colmo, luego llegó la Supercopa, que más que un regalo, fue una tortura para los aficionados de Fuenlabrada, que vieron como su equipo caía por un histórico 116-61 frente al Real Madrid. 

Todo esto generó un mar de dudas en torno a al proyecto, pero en la tercera jornada Fuenlabrada consiguió llevarse el derby frente a Estudiantes, y tanto equipo como afición recobraron de golpe los ánimos. 

El banqiillo de Fuenlabrada celebra un triple de su equipo | Foto: ACB
El banqiillo de Fuenlabrada celebra un triple de su equipo | Foto: ACB

Los fuenlabreños sumaron dos victorias más consecutivas como locales, y en la jornada 9 se impusieron a Baskonia por 80-92 en el Fernando Buesa Arena, donde hacía 20 años que no lograban el triunfo. Esto les situaba con un récord esperanzador de 4-5 tras los primeros dos meses de competición. Pero de golpe todo cambió.

  • Lesiones y malos resultados 

Los problemas físicos empezaron a llegar. Lesiones de todo tipo, algunas más graves que otras (Urtasun, Randle…), pero al fin y al cabo lesiones. Y con ellas llegaron los malos resultados. 

Montakit entró en una racha horrible en la que fue encadenando derrota tras derrota, sin encontrar un referente ofensivo claro y siendo un equipo muy débil en el lado defensivo. Fuenlabrada ha encajado de media 82 puntos por partido, por apenas 76 que era capaces de anotar (segundo peor equipo de la liga). 

Eyenga, agotado, tras la última victoria de Fuenlabrada | Foto: @BFuenlabrada
Eyenga, agotado, tras la última victoria de Fuenlabrada | Foto: @BFuenlabrada

De este modo, llegaron a encadenar 10 derrotas consecutivas hasta quedarse con un récord de 4-15 en lo más bajo de la clasificación. Sin duda habían tocado fondo. 

  • Las derrotas más duras 

Durante esa racha interminable de derrotas, hubo 2 que dolieron mucho más que las demás. La primera de ellas fue en el último partido de la primera vuelta. Era en casa y contra un rival directo, Betis. Y el Montakit no fue siquiera capaz de competir el partido, el cual acabaron perdiendo por 16 (69-85). 

Eyenga, muy frustrado, tiene que ser sujetado por sus compañeros | Foto: @BFuenlabrada
Eyenga, muy frustrado, tiene que ser sujetado por sus compañeros | Foto: @BFuenlabrada

La segunda fue la gota que colmó el vaso. Fue la última de esa racha de 10 seguidas y tuvo lugar en Murcia frente al UCAM, de nuevo un rival directo. Y de nuevo un mazazo tremendo. Perdieron por 23, perdiendo además el average particular con Murcia y quedando por primera vez como colistas en solitario. En ese momento tenían un balance de 4-15 y estaban a dos victorias (más average) de la salvación, que por aquel entonces la marcaban precisamente los murcianos. 

La derrota no dejaba otra opción que destituir a Jota Cuspinera, reemplazándole Paco Garcia, con el fin de intentar un milagro que acabara por salvar a los madrileños de un destino fatal. 

  • Paco García y un rayo de optimismo 

Con las caras renovadas en el banquillo, el equipo mejoró considerablemente en el lado defensivo, y las sensaciones generales fueron poco a poco a mejor. De los 4 partidos que dirigió el técnico, uno se ganó, dos se perdieron por 6 puntos o menos, y otro se suspendió cuando Fuenlabrada iba ganando por problemas con el parqué. Una imagen, por cierto, para la historia. 

Paco García había conseguido revitalizar a una plantilla que volvía a ser competitiva cada vez que pisaba una cancha de baloncesto. El equipo tenía hambre de victorias y estaba dispuesto a luchar hasta el final por una permanencia que, aún así, seguía estando demasiado lejos.

Dos partidos, más average, es una distancia demasiado grande para remontar en 11-12 jornadas. Más aún teniendo en cuenta el altísimo nivel de la Liga Endesa y lo justo que llegaba el equipo a nivel físico. 

Jerome Randle, recién aterrizado desde Australia, se lesionó, al resbalarse en el nuevo parqué, rompiéndose el ligamento cruzado anterior tan solo 12 minutos después de haber debutado con el club. 

Jerome Randle en el momento de su lesión de rodilla | Foto: ACB
Jerome Randle en el momento de su lesión de rodilla | Foto: ACB

Una mala suerte tremenda que aumentaba la lista de partes médicos del equipo. Todos los jugadores de la plantilla se habían perdido algún partido por lesión excepto dos: Anthony Brown, quien fue fichado en enero, y Vyacheslav Bobrov, aunque más tarde daria positivo en COVID-19 (ya se ha recuperado). 

  • Salvados y mirando ya al futuro

Por todo ello, el descenso parecía un destino inevitable, y por méritos deportivos era lo que Fuenlabrada se había merecido hasta el momento, pero el Coronavirus ha acabado evitando lo que estaba ya escrito. 

Tras varias semanas de parón total por el Coronavirus, la ACB anunció en un comunicado que en caso de reanudarse la competición, sería siguiendo una nueva ruta diferente. Sin Liga Regular y sin descensos. De este modo, el Montakit Fuenlabrada se aseguraba permanecer un año más en la máxima categoría del baloncesto español. 

No es la forma en la que le hubiera gustado a los fuenlabreños conseguir la salvación, pero la situación es la que es y aunque sea en un contexto tan desagradable, la decisión supone un enorme respiro para el club, “La decisión de la ACB nos da certidumbre” reconoció su presidente. 

Paco García será el técnico de Fuenlabrada el año que viene | Foto: ACB
Paco García será el técnico de Fuenlabrada el año que viene | Foto: ACB

Quintana también anunció que ya están trabajando de cara a la próxima temporada, un reto que se presenta más difícil que nunca, pero que ya tiene su primera pieza definida, Paco Garcia. 

Las buenas sensaciones del equipo en los 4 partidos que ha estado al frente del equipo le han hecho ganarse la confianza del club, de tal modo que será la pieza sobre la que empezar a construir un proyecto en el cual el resto de nombres son toda una incógnita.