Un año más y Atlanta Hawks sigue sin encontrar su sitio entre los mejores equipos de la liga. Cuando en 2015 la franquicia cuajó un excelente año para llegar a ser el segundo mejor equipo de la Conferencia Este (por detrás de los Cavs), todo pintaba muy bien en la ciudad del norte de Georgia y se veían capazes de venir a más y seguir sorprendiendo.

Manteniendo el mismo bloque que había asombrado a todo un país en 2015, el conjunto de Atlanta no terminó del todo bien la campaña 2015-16, clasificándose en cuarta posición del Este y siendo posteriormente barridos por Cleveland Cavaliers en las semifinales de conferencia (4-0).

Tras un verano de cambios importantes afrontaban la temporada 2016-17 con energías renovadas, pero por el momento se ven sin un rumbo claramente definido y rondando por el 50% de victorias mientras bordean la frontera que permite disputar la postemporada.

Tratando de mantenerse arriba

Tras una primera mitad de la temporada 2015-16 complicada, los Hawks salían con fuerza de la 65ª edición del All-Star. Realizaron una buena segunda parte con 15 victorias y siete derrotas, terminando en cuarta posición del Este con 48 triunfos y 34 derrotas.  En los payoffs les esperaban los Celtics, que habían terminado quintos con el mismo récord. Se esperaba un duelo muy interesante.

Atlanta superó a 'los verdes' por 4-2 y se plantó a semifinales de conferencia para verse las caras con los temibles Cavs de LeBron y compañía. La eliminatoria fue dominada claramente por los que serían los futuros campeones, barriendo 4-0 al equipo de Georgia.

Renovarse para subsistir

Al Horford fue el nombre más destacado de la offseason de los Hawks. Tras convertirse en agente libre, el dominicano decidió no renovar y abandonó la que había sido su casa desde 2007 para unirse a una histórica franquícia, los Boston Celtics. 

Teague, Horford, Millsap y Korver durante un partido (FUENTE: Getty Images)
Teague, Horford, Millsap y Korver durante un partido con los Hawks  (FUENTE: Getty Images)

Una pieza de los ilustres 'Cuatro fantásticos' que habían hecho de Atlanta un equipo dominador abandonaba el barco. Y no sería la única en dejar la franquícia en esa offseason, ya que los Hawks traspasaron a Jeff Teague a Indiana Pacers en un intercambio a tres bandas juntamente con Utah Jazz. Taurean Prince recaló en la franquicia de Georgia.

Atlanta perdía así a dos de sus pilares, manteniedo solo a Millsap y Korver. Pero no todo eran malas notícias, y regresaba a su ciudad natal un jugador que, a pesar de haber bajado su nivel, sigue siendo una bestia en la zona: Dwight Howard. En la ciudad del norte de Georgia esperan que tras su vuelta a casa 'Superman' regrese al nivel que ofreció en sus primeros años, cuando lo mejor que podía hacer el rival ante él era apartarse.

Con estos destacados cambios sufridos por la plantilla, Budenholzer busca traer de vuelta el buen juego a unos Hawks que siguen buscando su sitio.

Howard en el Media Day (FOTO: NBA Australia)
Howard en el Media Day (FOTO: NBA Australia)

Por debajo de las expectativas

Con la llegada de 'Superman' y con Denis Schroder cogiendo las riendas de un equipo liderado por Paul Millsap, los Hawks esperan que en la temporada 2016-17 puedan mantenerse arriba del Este, donde tanto les ha costado llegar.

Por el momento, 15 victorias y 16 derrotas que les mantienen en puestos de playoffs (aunque a solo medio partido del noveno), aunque el juego, la intensidad y la química del equipo es diferente al de pasadas temporadas. Mike Budenholzer tiene deber por hacer estas Navidades. El 2016 no se cierra de la mejor manera para los Hawks, pero el 2017 es un año nuevo y las cosas pueden cambiar para un equipo que sigue buscando un hueco en la élite baloncestística.

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Sobre el autor
David Ventura
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