La cuarta etapa de la carrera por etapas china sería la jornada que más diferencias crearía en la general, ya que sería el único final en alto, aunque tanto la quinta como la sexta etapa tengan más desnivel. Desde el principio hubo una escapada en la que marchaba el ciclista español del Caja Rural Antonio Molina junto al ruso Pavel Kotchekov (Kathusa-Alpecin), al holandés Lennard Hofstede (Sunweb-Giant) y al belga Victor Campenaerts (Lotto NL-Jumbo).
Durante la primera mitad de la etapa mantuvieron siete minutos de ventaja pero una vez pasada la zona de avituallamiento, allá por el kilómetro 77 de 151 el pelotón comenzó a reducir la diferencia hasta dejarla en 1:20 a falta de 20 km.
El equipo Sky hizo las últimas labores de neutralización y a seis kilómetros de la meta el pelotón acabó absorbiendo a la escapada. Poco después se produciría una caída masiva que provocaría el abandono de uno de los favoritos, Wilco Kelderman (Sunweb), y que acabaría con las opciones de corredores como Jakob Fuglsang (Astana).
Los pocos ciclistas que no habían sido afectados por la caída ya encaraban la subida final, de tres kilómetros con una pendiente media del 8% aproximadamente. A poco más de un kilómetro de la meta, se distanciaban tres corredores: Tim Wellens, Bauke Mollema y Nicolas Roche (BMC). Por detrás, Julian Alaphilippe (Quick Step) saltaba a por ellos junto a Ben Hermans (BMC), pero no llegaría a tiempo y los tres de cabeza se disputarían la victoria, aunque Roche llegaría sin fuerzas a los últimos metros, donde Wellens superaba claramente a Bauke Mollema.
El mejor corredor español sería Jesús Herrada (Movistar), que acabaría undécimo a 25 segundos del ganador, justo por detrás del joven corredor francés del equipo Quick Step Remi Cavagna, que junto al eritreo Marcus Debesay (Dimension Data), que ha sido noveno y que ya fue quinto en la segunda etapa, está siendo la revelación de la carrera.