Un triunfo de coraje, fuerza, confianza… e inteligencia. Así podríamos describir la victoria de Gianluca Brambilla en la decimoquinta etapa de la Vuelta a España 2016. A sus 29 años, el italiano del Etixx - Quick Step parece haber explotado esta temporada: en el Giro consiguió su primera victoria en una grande e incluso se permitió el lujo de portar la maglia rosa durante dos etapas. Hoy ha conseguido la que es para él la segunda victoria más importante de su vida, pero seguramente aquel triunfo del Giro no llegue a la épica de lo vivido esta tarde. En una jornada de auténtica locura, comenzada a 37 grados de temperatura, el italiano y Alberto Contador iniciaron las hostilidades tras el banderazo de salida, formando una escapada de muchos quilates en la que estaba presente el líder de la carrera, Nairo Quintana. Brambilla supo esperar y reservarse a rueda del grupo para resistir el ataque final del colombiano y hacerse con una etapa que pasará a la historia.

Ya en meta, visiblemente contento, atendió a los medios de comunicación. El italiano comenzó hablando del eléctrico comienzo de la etapa, recordando que fue él quien inició los ataques en los primeros kilómetros ascendentes. “Lo hice en el primer kilómetro porque sabía que entre los kilómetros tres y cinco era todo en subida”, explicó el del Etixx, que también aclaró que al final de la etapa de ayer estaba en el grupo de los mejores, pero cuando vio que no podía seguir el ritmo decidió guardar fuerzas pensando en la etapa de hoy, que era más corta. “Creo que eso me ha servido para poder hacer la diferencia hoy”, declaró Brambilla.

"Vencer siempre es bello y ganar por delante de Quintana y Contador es muy grande"

Pese a tener buenas sensaciones durante toda la etapa, Brambilla reconocía que “uno sabe que cuando te vas en fuga con Alberto Contador y Nairo Quintana es complicado decir que ganas seguro”. Precisamente, al italiano le sorprendió mucho la presencia de Contador y Quintana en la escapada, ya que “nunca había visto tanto tiempo rodar a un líder en fuga”. Pero aguantó junto a ellos y “en el último kilómetro he visto que Alberto sufría y me he quedado con Quintana. Él ha acelerado constantemente para intentar soltarme y a 700 metros ha cambiado el ritmo y he tenido que pedalear duro para poder seguirle. Luego he notado que estaba cansado porque llevaba ocho kilómetros tirando él solo. Y eso es lo que he aprovechado a 150 metros para demarrar y conseguir una victoria bellísima en una etapa que se recordará durante mucho tiempo”, ha relatado el pequeño escalador. 

Brambilla aseguró que la etapa del Giro en la que logró su primera victoria en una gran vuelta y se vistió de rosa ha sido su triunfo más especial, aunque “vencer siempre es bello y ganar por delante de Quintana y Contador es muy grande. En definitiva, hoy he ganado mi segunda etapa en una gran vuelta y ahora ya estoy pensando en la siguiente”. El italiano concluyó que, en principio, tenía pensado hacer un buen puesto en la general, pero pronto vio —seguramente a partir de la 11ª etapa en Peña Cabarga, cuando se alejó del top-10— que tenía que centrarse en un triunfo de etapa que “he buscado mucho”.