El Galatasaray es, junto con el Málaga, el equipo cenicienta de los cuartos de final de la Uefa Champions League y, a priori, un rival más que asequible para su contrincante, el Real Madrid. Pero si dejamos a un lado la ignorancia que nos transmite el nombre del equipo, la realidad es distinta. El Galatarasay cuenta entre sus filas con jugadores de talla mundial, como Sneijder o Drogba, así como al actual pichichi de la competición europea, Burak Yilmaz, que anotó 8 tantos en 8 partidos. Esto, unido a la moral que transmite su entrenador, Fatih Terim, y la atmósfera hostil del Türk Telekom puede poner en serios apuros a cualquier equipo.

Portería

Aunque está considerado como uno de los mejores guardametas del mundo, el uruguayo Fernando Muslera protege la portería turca con cierta irregularidad. Tanto puede realizar magistrales actuaciones, con paradas increíbles, como realizar errores cantosos y que pueden poner en serio peligro a su equipo. Un ejemplo es el fallo clamoroso del pasado 6 de febrero en el amistoso entre España y Uruguay, ante un tiro lejano sin peligro de Cesc Fábregas que acabó en gol. Otro de sus puntos débiles es su juego por alto, por lo que los centros laterales y las jugadas a balón parado puede llegar a ser fatídicas para el Galatarasay.

Defensa

Es la línea más vulnerable del equipo. La mayor parte del peso recae en las figuras del joven Semith Kaya y Albert Riera, recovertido a lateral izquierdo por Terim. Su adaptación fue rápida y con excelente resultado, ya que suple a la perfección su agresividad ofensiva con una sorpresiva calidad defensiva.

Otro de los grandes nombres de la primera línea es el ex-gunner Eboué. aunque su juego está lejos del que engatusó a los seguidores londinenses. Hay otros nombres conocidos para los aficionados a la Liga BBVA, como el exatlético Tomas Ujfalusi (que aún no pudo debutar debido a una larga lesión) y el ex-racinguista Felipe Melo.

En términos técnicos, los centrales habituales, Kaya y Dany Nonkeu, sufren mucho a campo abierto, y su solidez a balón parado es mínima, lo que puede ser un problema ante rivales que acechen mucho los tres cuartos del campo o que realizan rápidos contragolpes.

Mediocampo

El eje esencial del Galatasaray. En las últimas jornadas Felipe Melo se han convertido en la figura defensiva de un rombo de calidad. El jugador brasileño suple la falta de solidez de los centrales y da alas para la creatividad de Inan, que es el hombre más importantes para que los balones lleguen a la delantera. Tiene una gran visión de juego y sus pases son milimétricos. Además, su lanzamiento lejano puede poner en serio peligro a cualquier rival en el momento más inesperado.

En las bandas se encuentran Altintop y Sneijder. El turco, con una etapa no muy brillante en el Real Madrid, se ha reencontrado con el éxito en el cuadro de Estambul, con gran agresividad ofensiva y recorrido por todo lo largo de la banda. Sneijder, por su parte, no está dando lo mejor de sí. Su irregularidad lo aleja del que era en el Inter de Milán y sus mejores encuentros los disputa en la mediapunta, pasando a jugar Inan a la banda derecha. 

Delantera

El principal peligro del equipo y su línea más poderosa. La figura más mediática es Didier Drogba. El marfileño, junto con Sneijder, dieron la campanada del mundo futbolístico al fichar en el mercado de invierno por el club turco, descartando ofertas de otras ligas europeas más importantes e, incluso, de la Major Soccer League.

Junto con Drogba, la otra gran amenaza es Burak Yilmaz. El turco es, junto con Cristiano Ronaldo, el insólito máximo goleador de la Champions y pichichi de la liga turca con 16 tantos. Se trata de un delantero de la antigua escuela, con el área por bandera y un remate de cabeza igual de letal que su capacidad rematadora. Sus rápidas galopadas a través de las defensas rivales lo colocaron en la órbita de equipos como el Atlético de Madrid.

Técnico y afición

El éxito del equipo reside en tres pilares. El dinero del presidente del club, Ünal Aysal, que consiguió traer a Drogba, Altintop y Sneijder, el gran trabajo técnico de Terim y el apoyo incondicional de su afición. 

Fatih Terim es un hombre de sobras conocido en el lado europeo de Estambul. Como jugador, vistió los colores del Galatasaray durante diez años entre la década de los 70 y los 80, una de las más oscuras del club turco. Su vínculo con la entidad siguió ligado en su faceta de entrenador. La actual, es su tercera etapa en el banquillo de los leones.

Su primer paso fue el más glorioso del equipo, a finales de los 90, consiguiendo la copa de la Uefa ante el Arsenal en el año 2000. Después de ese título, pasó por la Fiorentina y el AC Milan para volver a entrenar durante dos años al Galatasaray antes de ser proclamado como seleccionar turco. Pero es en esta etapa donde el equipo vuelve a ser el que era hace una década. Líder de la liga turca, con siete puntos de ventaja sobre el segundo clasificado y máximo rival, el Fenerbahçe, esta a punto de ganar su segundo campeonato consecutivo y mantiene la esperanza en competición europea, aunque tendrá ante si a un Real Madrid con ganas de elevar su décima Champions y lleno de moral tras los resultados de sus últimos encuentros.

El esquema de juego favorito de Terim es el 4-4-2. Con este sistema, Melo actúa de tercer central adelantado, ayudando a aumentar la solidez defensiva, y robando balones arriba, consiguiendo un ritmo alto de ataque. Además, de esta forma Inan puede tener total libertad de juego para transitar los rápidos ataques hacia la bandas o a las galopadas de Yilmaz. Pero si un equipo les planta cara, la táctica del contragolpe y el juego rápido hacia las bandas les puede pasar factura por su endeblez en defensa.

Pero no lo tendrá fácil, sobre todo en su visita al Türk Telekom. El nuevo estadio del Galatasaray, inaugurado hace menos de dos años, acoge a más de 50.000 gargantas que lo convierten en una pesadilla para el rival. La más que conocida pasión futbolística turca se hace palpable a cada minuto que pasa. Los cánticos y la presión de la grada en el terreno de juego lo convierten en un fortín del que difícilmente se puede salir ganador, y en el estandarte de la importancia del Galatasaray,  uno de los equipos más laureados de Turquía con 18 ligas, 14 copas y 11 supercopas.

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Sobre el autor
Iago Fandiño Bonome
Periodista licenciado por la USC. A Coruña.