El fútbol del sudeste asiático ha crecido en calidad y, por supuesto, en expectación. Australia decidió unirse a dicha federación ya que prefiere jugarse con los países asiáticos una clasificación directa y así saltarse rondas previas en los clasificatorios para las copas mundiales de fútbol. Hay que recordar que la mejor selección oceánica debe jugar sí o sí una fase de repesca.

Japón sufrió su germanofilia en el fútbol

El fútbol en Japón ha estado condicionado toda su historia por un motivo que debería ser ajeno a cualquier deporte: la política. Las inclinaciones políticas de sus gobernantes privaron a la selección nipona de pertenecer a la FIFA durante la Segunda Guerra Mundial. Es cierto que, por razones obvias, no se jugó ningún gran torneo, pero aunque se hubiera celebrado, Japón habría estado excluido de dicha competición. Aun así, para ver su primer partido oficial reconocido hay que remontarse al año 1923 cuando cayó derrotada ante Filipinas.

La FIFA ya otorgaba cupos, a dedo, a los países de Asia en 1934, veinte años antes de que se creara la AFC (Confederación Asiática de Fútbol). El primer representante en tierras americanas sería Israel (que en la actualidad ocupa puesto UEFA) y fue en el Mundial de Argentina de 1978. A pesar de esto, la primera selección en estrenarse en un Mundial sería la actual Indonesia, que en 1938 (Mundial de Francia) se llamaba Indias Orientales Neerlandesas.

1930 y 1934: Japón no optó ni a clasificarse

La Copa del Mundo de selecciones del 1930 estuvo compuesto por 16 equipos y ninguno de ellos fue asiático. Mismo número de asiáticos cuatro años después, ninguno. Como se ha mncionado anteriormente, la FIFA comenzó a dar cupos a las selecciones asiáticas a partir del Mundial de 1934. Tras este período, Japón fue la “apestada” de Asia para la FIFA y le quitó el privilegio de formar parte de su organización.

1950: FIFA le abre la puerta a Japón

Con la Segunda Guerra Mundial ya finalizada, los torneos de la FIFA volvieron con fuerza y Japón volvió a formar parte del organismo. Aún así, no disputaría la Copa Mundial celebrada en Brasil. De hecho, este mundial fue famoso por una anécdota. Birmania, Filipinas e Indonesia se retiraron de la pelea por lo que la India se clasificó automáticamente. La FIFA se negó a que los jugadores saltaran al terreno de juego descalzos y la federación hindú optó por retirarse del torneo dejando así vacío el cupo del país asiático.

1962: Japón se queda a las puertas de Chile

Para el Mundial 1962, Europa, África y Asia debían jugar repesca entre sí. Los ocho mejores europeos se clasificaban directamente mientras que el mejor asiático y el mejor africano debían jugar la repesca. Japón se jugó ser el mejor asiático contra Corea del Sur y perdió. El primer partido, disputado en Seúl, los jugadores nipones perdieron y en la vuelta disputada en Tokio, la victoria de Corea del Sur certificaba su clasificación para la repesca, en la que Yugoslavia no tendría compasión y vencería a los asiáticos.

La Israel “asiática” se clasificó para el Mundial de 1970

Para el Mundial de 1970 disputado en México, por primera vez la AFC se unió a la OFC (su homóloga de Oceanía) para determinar qué selección se clasificaba para disputar el Mundial. Un formato muy desigual mandó a la selección japonesa a casa muy pronto. Israel, Nueva Zelanda y Rodesia pasaron a la segunda ronda, teniendo que jugar una liguilla Australia, Japón y Corea del Sur. En un principio la selección de Corea del Norte también estaba en el grupo pero se negó a participar ante la posibilidad, muy alta, de enfrentarse a Israel. Los japoneses solo pudieron empatar dos encuentros, perdiendo los otros dos. Al final sería Israel quien ocupara la plaza de asiática en el Mundial.

Argentina 1978 tampoco fue el escenario para debutar

La Argentina de Videla tampoco vio los ojos rasgados de los hijos del sol naciente. De nuevo, una fase de clasificación desastrosa del combinado japonés les dejó fuera. Corea del Sur e Israel fueron sus verdugos. Japón tendría derecho a quejarse ya que jugó dos partidos en campo israelí debido, entre otros factores, a la cercanía de los días de los enfrentamientos. Solo pudo arrancar un empate en los cuatro partidos. A la postre, sería Irán el clasificador para el Mundial.

En estos años, un jugador explotó y eso lo llevó a consagrarse en Europa. Se trata de Yoshuiko Okudera, en la imagen de abajo. Dicho jugador fue el primer japonés en jugar en Europa. Su vida futbolística en Europa nació, creció y murió en Alemania, ganó un doblete con el FC Köln, que dicho sea de paso este equipo volverá a la Bundesliga la temporada que viene. Alemania es un país en el que el fútbol nipón, asiático en general, no pasa desapercibido.

La ausencia de éxitos en el fútbol japonés, no hacía fácil su desarrollo en estos años ni aunque en sus filas tuviera a gente como Kamata, Mori, Sugiyama o Kunishige Kamamoto, el máximo goleador de la historia de la selección de Japón.

Otra vez México, otra vez Corea del Sur

Desde el Mundial de España en 1982, la AFC y la OFC decidieron hacer una fase de clasificación para los mundiales por caminos separados. Lógico. La FIFA accedió a este nuevo método ya que hacerlo de la otra manera era una forma de privar a ciertas selecciones de tener alguna oportunidad. Japón se deshizo en la fase de grupos de Singapur y Corea del Norte, respectivamente. Se plantó en la segunda ronda donde doblegó a Hong Kong pero en la ronda final, en la definitiva, sería de nuevo Corea del Sur quien acabara con los sueños japoneses. En Tokio

Dos goles separan a Japón de Estados Unidos

Japón nunca ha estado tan cerca de jugar un Mundial como lo estuvo en Doha. Kazuyoshi Miura, uno de los mejores jugadores japoneses de todos los tiempos y todavía en activo, fue uno de los pilares fundamentales para la selección en la fase de clasificación. El combinado del holandés Hans Ooft hizo una primera fase casi impecable. Hizo 15 puntos de 16 posibles, por aquel entonces las victorias se contaban con dos puntos y los empates con uno. A la fase final de Doha llegaba con la condición de favorito junto con Corea del Sur.

Los japoneses aún recuerdan la Agonía de Doha

Quedar primero en el grupo de clasificación daba el pase a la fase final que se celebraba en Doha, capital de Qatar. Seis aspirantes para solo dos puestos. De los seis aspirantes, cinco llegaban con opciones a la última jornada: Japón, Corea del Sur, Irán, Irak y Arabia Saudí. Corea del Norte no tenía ninguna opción y se dejó llevar en la última jornada ante su vecina del Sur. Vecina, que no hermana. Con este resultado y el de Arabia Saudí, que ganó a Irán, a Japón solo le quedaba ganar ya que en un empate a puntos, perderían en detrimento de Corea del Sur por tener peor golaveraje.

Sería la primera vez que Japón pisase América. Sería su primera vez en un Mundial. Todo estaba de cara, la selección era el grupo que había ganado hacía dos años la Copa Asiática de Naciones y además, en 1994, se había creado la Liga Profesional de Fútbol japonesa. Todo era alentador hasta la hora del partido. En la delantera, Miura estaba acompañado por Hasegawa y Nakayama, el primer jugador japonés en anotar un gol en un Mundial para Japón. Pero este hecho ya sería en Francia 1998.

Adiós a la Copa del Mundo en el último suspiro

Con todo esto, el partido comenzó bien para los japoneses. Miura anotó el primer gol a los pocos minutos del comienzo del partido. En la segunda mitad Radhi empató para los iraquíes. En el minuto 80 Nakayama batía al Salim Saad y la victoria, y la clasificación, parecía un hecho. En el último minuto, como casi todas las épicas aunque esta vez no sirvió de mucho, un centro desde la derecha en un córner botado por el equipo iraquí, lo remató a gol Salman de cabeza. Fue el gol de la eliminación mutua ya que a Japón les eliminaba e Irak estaba eliminado aunque empatara el partido o lo ganara.

1999: decepción en Asunción

Japón se estrenó en Paraguay en la Copa América de naciones de 1999. Fue la primera vez que Japón fue invitado a dicha competición. Fue un fracaso digno de olvidar. Quedó encuadrada en el mismo grupo que la anfitriona, Perú y Bolivia. Un grupo, a priori, en el que la selección nipona tenía opciones de, por lo menos, quedar segunda de grupo. El primer partido, ante Perú, lo perdió a falta de diez minutos por 3-2. Ni los goles de Wagner Lopes ni Miura pudieron con los peruanos.

La segunda jornada citaba a la anfitriona con Japón. Fue un tremendo correctivo el de la selección guaraní que ganó por cuatro goles a cero. Los japoneses, ya fuera del torneo, se dejaron llevar en la tercera jornada y sacaron un punto ante Bolivia, que también estaba eliminada.

La tragedia de 2011 impidió a Japón repetir en América

Japón sufrió una de las mayores catástrofes de la historia. En 2011 un tsunami destrozó Japón, dejando más de veinte mil fallecidos y un terrible accidente nuclear en Fukushima, Miyagi e Ibaraki. La Conmebol invitó a los japoneses pero, como era de esperar, Japón no tenía alma de fiesta por aquel entonces. Su puesto lo ocupó la selección sub'23 de Costa Rica.

Brasil 2014: obligada a no ser un Haikus

Japón ha trabajado duro a lo largo de su historia por ser una selección competitiva. Ha tenido una fase de clasificación plácida a pesar de que en la primera fase acabara segunda en su grupo por detrás de la selección revelación: Uzbekistán. Perdió dos partidos, pero se clasificó como segunda para disputar la ronda final en la que acompañaría en el grupo a Australia, Jordania, Omán e Irak. Nada tenía que ver esta selección, ya forjada en grandes encuentros, con las selecciones japonesas de antaño que se quedaban fuera del Mundial por poco. A falta de tres jornadas ya estaba clasificado gracias al resultado abultado que tuvo a su favor en la segunda jornada contra Jordania, que en la vuelta ganaría a Japón.

Japón perdió ante Jordania y empató sus dos partidos frente a Australia. Dominio japonés que bien vale un puesto en el Mundial. En 2014 volverá a Brasil después de que en 2013 tuviera una participación muy floja en la Copa Confederaciones. Recordar que en su grupo estaba Brasil, Italia y México. Perdió ante las tres selecciones aunque plantó batalla tanto a Italia como a México.

Estos son los samuráis que lucharán por hacer un buen papel en el que será el primer Mundial de Japón en el continente americano.

1. Eiji Kawashima

2. Shusaku Nishikawa

3. Shuichi Gonda

4. Yasuyuki Konno

5. Masoto Morishigue

6. Masahiko Inoha

7. Maya Yoshida

8. Yuto Nagatomo

9. Atsuto Uchida

10. Gotoku Sakai

11. Hiroki Sakai

12. Yasuhito Endo

13. Hotaru Yamaguchi

14. Toshihiro Aoyama

15. Makoto Hasebe

16. Yoshito Okubo

17. Manabu Saito

18. Yoichiro Kakitani

19. Keisuke Honda

20. Shinji Kagawa

21. Shinji Okazaki

22. Hiroshi Kiyotake

23. Yuya Osako

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Sobre el autor
Diego Duran Barreira
Comunicación Audiovisual y fiel al Periodismo deportivo sin bufanda. Coordinador y redactor de la sección de la Bundesliga.