Durante el mes de diciembre pasado, mientras el año 2014 vivía sus últimos momentos, los jugadores y cuerpo técnico del Paris Saint-Germain se encontraban en Marruecos entrenando con miras a los importantes partidos que les traería la segunda parte de la temporada. Antes del amistoso contra el Inter de Milán (que terminó en triunfo de los franceses por 1-0), Laurent Blanc señaló que cambiaría su manera de dirigir al PSG:
“Habrán cosas que no continuarán de la misma manera, las indisciplinas terminarán. Debemos comenzar a trabajar de forma rigurosa y mantenernos así semana a semana”, aseguraba.
Edinson Cavani ha sido la principal “victima” del nuevo estilo Blanc. Lavezzi, Verratti y Rabiot también han sufrido el rigor del entrenador.
Un mes y medio después, la promesa ha resistido el paso del tiempo. Y ha tomado fuerza. Blanc sigue firme en sus nuevas convicciones y de paso se muestra más directo y sincero que nunca. Este estilo también ha cambiado su relación con los medios: Criticado anteriormente por sus “poco profundas” conferencias de prensa, el entrenador del PSG hoy es un verdadero francotirador, al cual no le tiembla la voz para reprochar la conducta de sus jugadores.
Por ejemplo, el retraso en el regreso de vacaciones de Cavani y Lavezzi fue una gran oportunidad para mostrar el nuevo poder de liderazgo del entrenador parisino: “La falta de ambos jugadores fue inaceptable. Estamos en un proyecto colectivo y cuando se ponen las ambiciones personales delante, todo el trabajo del grupo corre peligro. Si alguien llega a poner en riesgo nuestro trabajo puedo convertirme en una persona infame y radical”.
Serio y contundente
Finalmente, ambos jugadores fueron castigados internamente por dos partidos y Cavani debió esperar algunos encuentros más para recuperar su titularidad, algo que Lavezzi aún no ha conseguido.
Luego, durante el mercado de invierno, Laurent Blanc fue claro y no ocultó sus deseos de realizar cambios en la plantilla del equipo: “Sin duda habrán movimientos: Ya sean compras, ventas, préstamos... El presidente del club ya está al tanto de todas mis pretensiones”.
Las estrellas del PSG ya no son intocables
Mucho más agresivo en su discurso tanto en la interna como con la prensa especializada, el entrenador ya no es un simple protector de sus jugadores. Pero a pesar de esta última medida el equipo parece apoyarlo, tomando en cuenta los resultados durante 2015: Siete triunfos, un empate y solo una derrota.
Pero esta alza en los números aún no deja contento a Blanc, quien sigue teniendo a Edinson Cavani como uno de los “responsables” de los malos momentos en el fútbol del PSG. Una discusión entre ambos, luego que el uruguayo fuera reemplazado tempranamente en el partido contra Rennes, fue confirmada por el técnico.
“Sí, tuve un intercambio de palabras con Cavani. Y también con Adrien Rabiot. Fue una discusión personal, pero le hice saber que encontré deficiente su actuación en el terreno de juego. Hoy su entendimiento con Ibrahimovic no fue bueno, por eso hice salir a Edi”, comentó.
Un hecho diametralmente opuesto a lo que nos tenía acostumbrados Blanc, duramente criticado por su poca reacción y pasividad al momento de enfrentar partidos adversos.
Otra de las víctimas del “Nuevo Laurent” fue Marco Verratti, a causa de su indisciplina en el disputado partido contra Lille: “Marco es un apasionado, pero no tengo ganas de bromear al respecto. Se está perjudicando a sí mismo y estoy cansado de repetírselo. Al parecer, él no entiende. Tenemos una buena relación, es un joven lleno de talento, pero si continúa así tendrá muchos problemas. Hace dos años que he realizado un trabajo de prevención con Marco. Carlo (Ancelotti) también lo hizo. Por eso preferí sacarlo del partido. Incluso debí realizar el cambio antes, en el entretiempo”.
¿Qué escondes, Laurent?
Blanc no pretende bajar el ritmo de su nuevo estilo. Su nuevo método está rindiendo frutos y se nota una alza en el juego del PSG. Pero además, el proyecto del exentrenador del Bordeaux y la Selección Nacional esconde una estrategia a largo plazo, que busca mejorar su imagen como director técnico. Siempre tratado como un líder incapaz, de débil manejo y poca reacción, el nuevo Laurent Blanc se encuentra, cual político, en una campaña personal para cambiar las ideas que el mundo futbolístico tiene sobre él.
El actual entrenador del PSG sabe que, probablemente, dejará el cargo en junio próximo, por tanto este es el momento perfecto para corregir sus malos hábitos, con el objetivo futuro de seguir entrenando algún equipo de primer orden durante la próxima temporada.