Memphis Depay fue el primer jugador que fichó el Manchester United para esta nueva temporada, antes incluso de que el mercado de fichajes se abriera, por unos 30 millones de libras. De esta manera, los red devils, se adelantaban a, prácticamente, la totalidad de los grandes conjuntos del continente -sonó para Real Madrid, Barcelonta, etc- en la contratacción del que era y es denominado el "nuevo Cristiano Ronaldo". Un tipo de jugador que los diablos rojos han estado buscando desde que el astro portugués comenzó a deslumbrar al mundo del fútbol con la camiseta del Manchester United.
Desde ese momento, el conjunto de Old Trafford ha incorporado jugadores como Nani, quien llegó cuando Cristiano aún estaba en el equipo, o Zaha sin llegar a conseguir el resultado esperado. Sin embargo, con la llegada de Depay puede, aún es pronto para saberlo, haberse dado en el clavo, ya que, el internacional holandés posee muchas similitudes con el tres veces balón de oro. Memphis juega por la misma banda que Cristiano, es un jugador rápido, regateador, con un gran disparo, capaz de echarse el equipo a la espalda, incluso, posee el mismo disparo de falta que el portugués, la folha seca.
Inicio complicado y cambio de posición
Depay, quien lleva su nombre -Memphis- en su camiseta debido a que se lleva mal con su padre, llegó al Manchester United tras ganar la Eredivisie con el PSV, donde jugó 30 partidos y marcó 22 goles. En un principio, Louis van Gaal contaba con él como media punta por detrás de Rooney, con el que el técnico holandés esperaba que formara una sociedad letal. Sin embargo, pasada la primera jornada de la Premier Legue, que enfrentó al Manchester United con el Tottenham en Old Trafford, el entrenador holandés se dio cuenta que su compatriota no estaba dando prácticamente nada de lo que se podía esperar de un gran jugador como es Memphis.
En el siguiente partido, ante el Aston Villa en Villa Park, van Gaal decidió devolver al jugador a la banda izquierdo, donde no lo había puesto durante la corta estancia que el jugador llevaba en el Manchester United, y aunque no sobresalió mucho, Memphis tuvo más presencia en el juego del equipo y dió más sensación de peligro que en los encuentros anteriores.
Van Gaal decidió mantenerle en esa posición en el partido de Champions League ante el Club Brujas y fue ahí donde el Memphis que había llamado la atención de toda Europa apareció. El jugador holandés se echó el equipo a la espalda para darle la vuelta a una eliminatoria que se había puesto muy complicada para los diablos rojos tras en gol en propia puerta de Carrick y, primero, con una gran jugada personal que comenzó con un sombrerito y, después, con un gran disparo ajustado desde fuera del área inalcanzable para el portero, dió la vuelta a la eliminatoria.
Memphis siguió intentandolo para conseguir su hat-trick particular en su primer encuentro en la máxima competición continental, pero el portero visitante y un mal disparo cuando se encontraba sólo ante el guardameta se lo impidieron. Aún así, Memphis redondeo su noche poniendole a Fellaini un gran centro para que este anotará el definitivo 3-1 que le pone la eliminatoria muy favorable a los red devils. Ahora, las buenas sensaciones que mostró en este encuentro, debe volver a demostrarlas este fin de semana en el encuentro que les enfrentará al Newcastle en la tercera jornada de la Premier League para, de esta manera, empezar a escribir sus primeras páginas doradas en la que esperemos, sea una gran historia como jugador del Manchester United
