Precioso partido en Londres. La capital inglesa se vistió de hammers y gunners para abrir una nueva jornada de la mejor liga del mundo con un partido entre sexto y tercer clasificado, ambos equipos jugándose mucho.

La primera mitad fue mejorando a cada minuto

A juzgar por la alineación de Bilic, daba la sensación de que la disposición táctica sería un 5-4-1 con Cresswell y Antonio de carileros adelantados. Se confirmó pronto que era así, pues al minuto de aprtido una llegada del lateral izquierdo inglés casi abrió el marcador, aunque estaba en fuera de juego. Por su parte, Wenger puso en el 'once' a Welbeck y al joven Iwobi, acopañados en ataque por Alexis y Özil.

El West Ham trató de dominar la posesión como en los últimos partidos; pero el Arsenal, en lugar de luchar por eso mismo, trató de hacer transiciones rápidas y contraataques. Fue un acierto, pues las cabalgadas de cuatro hombres dañaban a los locales, aunque sin concretar ninguna ocasión clara. Sin embargo, el West Ham ha demostrado que tiene calidad, y la calidad puede decidir. Cresswell puso un centro al segundo palo que remató Carroll con una espectacular chilena. El balón iba desviado, pero Lanzini  lo empujó a gol con la cabeza. El estadio empezó a rugir, pero el linier alzó la bandera. La repetición mostró el error evidente del colegiado, pues Bellerín, al defender el centro, quedó más retrasado habilitando así la posición del argentino.

Si se habla de calidad, entonces se tiene que hablar de Mesut Özil. En una jugada de ataque, un despeje flojo de Tomkins quedó en tres cuartos. Iwobi dio un gran pase entre líneas al alemán (habilitado justamente en línea por la tardía salida de Ogbonna). Con una sangre tan fría como el hielo, Özil la ajustó al palo derecho ante la salida de Adrián a los 18 minutos para poner el 0-1.

Özil definió con clase para poner el 0-1 | Foto: Arsenal
Özil definió con clase para poner el 0-1 | Foto: Arsenal

Payet comenzaba a hacer de las suyas bailando con los jugadores gunners pero sin dejarles tocar el balón, lo que acabó dando el dominio del partido al West Ham. Sin emargo, el Arsenal se repuso de esos buenos minutos volviendo a controlar el balón en una jugada larga en el 35. Tocando con tranquilidad, Iwobi puso otro gran balón a Alexis Sánchez. El chileno demostró la pegada que tienen los gunners definiendo con calidad para doblar la ventaja visitante. 

Fue un duro golpe para el West Ham, que tardó varios minutos en espabilar y empezar a meter miedo a un Arsenal cada vez más seguro. Fue por medio de Carroll, que se giró hacia su zurda y el disparo lo atrapó bien Ospina. Un gran centro de Cresswell fue rematdo con problemas por Carroll, pero fue una ocasión al fin y al cabo. El West Ham decidió aprovechar este rcurso: tras una pérdida de balón de Coquelin, el balón llegó de nuevo a la banda de Cresswell. El inglés puso un centro aún mejor hacia Andy Carroll. No podía ser otro que el gigantón, quien remató a gol ajustando el balón al palo. 1-2 al minuto 44, allanando el camino para la dura tarea de la segunda parte.

El West Ham se está destapando como especialista en remontadas, y tras recortar distancias, siguió apretando con los balones áereos a Carroll que estaban ahciendo mucho daño al Arsenal. Tras dos córner seguidos, el ariete inglés recibió un balón templado en medio del área. Lo paró con el pecho, su tiro rechazó en el defensa, y se sacó una media tijera que entró a la derecha de la portería, imposible para Ospina. En dos minutos, dos goles para empatar la contienda.

Así festejó Carroll su segundo gol para empatar antes del descanso | Foto: West Ham United
Así festejó Carroll su segundo gol para empatar antes del descanso | Foto: West Ham United

Brutal arreón del West ham los últimos cinco minutos de primera mitad que empataba un fantástico partido.

Los hammers completaron la remontada

Tras el descanso, Bilic hizo una modificación clave en el equipo: Emenike entraba para apoyar las jugadas arriba por un flojo Tomkins, pasando a 4-4-2. Cinco minutos tardó este ajuste en dar efecto: Antonio, ahora como lateral, desbordó a Monreal y puso un centro al segundo palo. tan hábil y listo como siempre, Carroll esperó el centro al segundo palo, ganando con facilidad el salto a Bellerín y poniendo el 3-2. Espectacular hat trick del inglés, que completaba un partido sensacional.

Gran remate de cabeza de Carroll para adelantar a su equipo y anotar el 'hat trick' | Foto. West Ham United
Gran remate de cabeza de Carroll para adelantar a su equipo y anotar el 'hat trick' | Foto. West Ham United

El golpe desarmó momentáneamente al Arsenal, que pudo encajar algún gol más tras los afilados ataques locales.

El Arsenal buscó la remontada con todo

Wenger, consciente de que su equipo necesitaba más madera, dio entrada a Giroud por Elneny (quedándose así sin sus pivotes defensivos tituares) justo cuando los visitantes ganaban un córner. En ese saque de esquina, un mal despeje de Reid desembcocó en un trallazo de Ramsey que se colaba de no ser por Lanzini, que metió el pie para evitar el empate.

Restaban 20 minutos cuando se puso el 3-3 en el marcador. Jugada por la derecha tras un córner visitante, un mal control de Welbeck en el área se convierte en una asistencia a Koscielny, que se quedó tras subir a rematar un córner. Locura en la grada y en todos los aficionados al fútbol con este fenomenal partido en el que ambos estaban sudando sangre por ganar.

Koscienly celebró con rabia el gol que puso el definitivo 3-3 | Foto: Arsenal
Koscienly celebró con rabia el gol que puso el definitivo 3-3 | Foto: Arsenal

El West Ham avisó por medio de Payet, pero su buen disparo lo rechazó el meta del Arsenal. Los gunners salían como relámpagos a la contra, los hammers respondían... Estaba siendo uno de los mejores partidos de la temporada, un regalo para las aficiones. Cabezazo alto de Giroud y el West Ham descansó con balón unos segundos. Maduró la jugada y Ospina tuvo que salvar un difícil disparo con bote de Cresswell (en el córner, Reid voló como un karateka pero no conectó). Wenger quemaba su último cartucho metiendo a Theo Walcott por Welbeck tras una  jugada en la que Alexis se lió tras pisar área con mucho peligro.

La lógica se impuso y en los últimos 10 minutos, el ritmo de juego bajó, pues estaba a un nivel altísimo. Varios jugadores como Antonio, Payet y Özil se veían realmente cansados tras el inmenso desgaste que había exigido el partido. Antes del descuento, tan solo un desviado remate de primeras de Payet. La tablilla mostraba tres minutos de añadido, pero el milagro no sucedió. West Ham y Arsenal se repartían un punto, si bien tras el espectáculo que ofrecieron ambos, merecían mucho más los dos.

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