El Sunderland sigue coqueteando con el descenso aunque todo apunta que esta por fin es la temporada de la tan temida bajada a los infiernos. David Moyes y su Sunderland siguen batiendo récords, aunque siempre negativos y tras la derrota por 2-0 de esta mañana ante el Arsenal ya quedan como el equipo con el peor arranque en la historia de la Premier League.
Dos puntos de treinta posibles son el pobre balance del escocés en esta etapa como técnico de los Black Cats y ya supera al Manchester City de la temporada 1995/96 por la diferencia de goles. Los Skyblues terminaron perdiendo la categoría esa campaña y mucho tienen que cambiar las cosas para que en el Stadium of Light no vean fútbol de Championship el próximo curso.
A comienzos de la semana pasada la estrella del equipo, Jermain Defoe, declaró que parece que este Sunderland seguía retrocediendo, para que pocos días después otra de las piezas claves en el esquema de Moyes, Jack Rodwell, expresara del mismo modo su opinión. "Creo que hemos dado un paso atrás", dijo el centrocampista. Defoe ha hecho cinco de los siete tantos del Sunderland esta temporada en la Premier League, y si el goleador del equipo ya no apoya al entrenador, apenas hay esperanza para la mejora.
Defoe ha hecho cinco de los siete goles del Sunderland esta temporadaAquel Manchester City (tan lejos del equipo que ahora entrena Pep Guardiola) también contaba con dos puntos tras diez encuentros pero la derrota de hoy por cuatro goles hace que con -13 de diferencia los Black Cats ya tengan el dudoso honor de ser el peor equipo en la historia de la competición.
El otro seguidor de estos catastróficos comienzos, el Swindon Town en la 1995/96 también terminó descenciendo aunque la únca esperanza del equipo técnico de Moyes es intentar copiar la magnífica escapada del Crystal Palace en la 2013/14 y del Everton en la 1994/95 que con tres puntos a estas alturas del campeonato consiguieron la permanencia.
El siguiente reto del Sunderland será ante el Bournemouth a domicilio, un partido de los llamados de seis puntos, y con el parón internacional a la vuelta de la esquina parece que al escocés se le está acabando el crédito.
