Los de Rudy García buscan dar la bofetada en condición  de visitante ante un empobrecido Metz. A mediados del mes de octubre, un partido donde las oportunidades eran abundantes, los visitantes  solo se abonaron un gol y con esto fue suficiente para vencer a su rival.

En este momento del torneo, el Metz debe resucitar del infierno que lo acosa en este instante.  El temido  descenso está caminando  sigilosamente por cada jugador de la plantilla, ya que, con 21 puntos agota sus últimas posibilidades para mantener los pies en la máxima división del fútbol francés. Por otro lado, el Marsella, que anda campante y disfrutando de sus nuevos refuerzos, busca revalidar la agradable actuación que mostró ante el poderoso Lyon en Copa de Francia.

Es el instante  de encontar sensaciones por parte de ambos conjuntos con este plato de alta cocina que nos ofrece el fútbol, disfrutar de una buena cena y encontrarse figuras del talante de Evra,Payet y Gomis. Serán 90 minutos de infarto que definirán mucho para las dos escuadras.

 El Metz quiere un poco de aire

Guido Milan y Simon Falette son dos torres que imponen el miedo en área del rival, siendo dos jugadores corpulentos que cada cabezazo, cuando sus compañeros sacan de esquina,  lo convierten en violentos aguijonazos  para los defensores contrarios. Los granates buscan una cápsula de vida que los ayude a salir del hueco profundo de la tabla de clasificación, es así, como  su comandante Philippe Hinschberger planea un juego por las bandas y que estos sean  los primeros peldaños que les sirva para conseguir una victoria en casa,ante su público.

 Las aspiraciones de este equipo, fundado hace 98 años, es reivindicar buenas temporadas, con un pintoresco y brillante juego colectivo, que por ahora es una completa pesadilla difícil de remediar. EL técnico austriaco está incómodo al no contar con el exótico y extrovertido Assou Ekoto, que en alguna ocasión desfiló por los pasillos del White Hart Lane de Londres.

 El Marsella quiere arruinar ilusiones

En condición de visitante, los jugadores al mando de Rudy García quieren mortificar unas fechas más el sufrimiento de los jugadores del Metz; en varias salidas, este conjunto a resultado un poderoso equipo tras  tras poner en serios apuros a sus rivales. Las obligaciones del histórico campeón de Francia es moldear una victoria con diversas modalidades de juego, el ala izquierda por parte del veloz Evra y regreso del hijo prodigo: Dimitri Payet, proveniente del West Ham United. Ahora parece que todo tiene sentido, la felicidad del entrenador está a flor de piel y como no, el tridente anda recargando sus cartuchos para un partido vibrante   y de gran repercusión. En este momento el visitante se acomoda sexto en la liga francesa, una posición no tan agradable para muchos por lo que concierne a un equipo tan poderoso y adinerado en este país. 

 Otro objetivo que quiere conseguir el visitante es un puesto en zona europea, algo que siempre ha sido  sistemático para este histórico conjunto; sin embargo, algunos resultados no le han acompañado en el trasegar de los partidos por diversos puntos esquivos y por falta de suerte. Se espera con cautela que Payet sea ese capataz que los guíe a la victoria. 

Antecedentes en el Stade Saint Symphorien

La última visita del Olympique de Marsella al Metz se produjo el uno de mayo de 2015, ganando el encuentro por 2-0. Un dato importante a destacar se remonta al año 2006, cuando el Metz ganó la contienda, el diecinueve de febrero (1-0). Desde el año 2000, el claro dominador es el Olympique de Marsella, tanto de  local como de  visitante. 

Posibles alineaciones