La magia del fútbol se adueñaba del Estadio Louis II donde se disputaría las semifinales de la Copa de La Liga. El ganador del encuentro se haría con una plaza para la final del torneo donde se enfrentará a la fiera de la capital francesa, el Paris Saint Germain.
Falcao nunca falla
El colegiado Amaury Delerue depositaba el esférico en la zona central del terreno de juego y pitaba, comenzando de esta manera el encuentro. El partido resultaba difícil de digerir al principio. Las transiciones lentas, el poco juego y los atascos en el centro del campo eran los protagonistas de unos primeros diez minutos sin ocasiones. Sin embargo, un poco después una incursión por la banda de Djibril Sidibé provocaría el descontrol de la defensa visitante y Falcao sería el encargado de pescar el balón perdido en el área para transformar el primer gol del encuentro. Se reencontraba por segunda vez con el gol el colombiano en esta competición.
A partir de ahí el dominio sería claramente de color rojiblanco ya que dos minutos tras el tanto, el VAR aparecería para solucionar la incógnita de si había sido o no penalti la acción de Lecomte sobre Jovetic. Finalmente el árbitro indicaría que la posibilidad de penalti era inexistente y por lo tanto, el marcador continuaría 1-0 a favor de los locales. El partido seguía en la misma sintonía, la dinámica del Mónaco estaba siendo perfecta, sin embargo todo lo contrario ocurría con el cuadro dirigido por Michel Der Zakarian.
Era tal el asedio sobre el arco del portero visitante que finalmente acabó llegando el segundo tanto de la noche, obra de El Tigre Falcao. Su doblete llegó tras una muy buena jugada colectiva en la que Rony Lopes depositaría un buen balón para que Radamel sólo tuviera que empujarla para acabar tocando el esférico la red.
Ya durante los últimos minutos de la primera parte, la participación del Montpellier sería mayor, pero sus tímidas llegadas al área rival no conseguirían superar la férrea defensa de los locales. Por el momento, el Mónaco estaba siendo justo vencedor del encuentro, estaba jugando mejor y estaba creando más ocasiones. En la segunda mitad, tendrían que ser capaces de aguantar el marcador para conseguir el billete a la final de la Copa de La Liga.
Juego poco vistoso
Parece que la charla durante el descanso de Michel Der Zakarian caló en sus hombres, ya que salieron con más ganas y buscando recortar distancia en el marcador. El Mónaco siguió realizando el mismo juego que en la primera parte: toque, y en el ámbito defensivo, esperar el fallo del rival. Sin embargo, los visitantes imperaron durante los primeros minutos de la segunda mitad. Por ello, el Mónaco decidió meter velocidad y desborde en el rectángulo de juego a través de sustituciones, para buscar el tercer tanto y sentenciar así el partido.
Gracias a estas incorporaciones, sólo un minuto después, aconteció lo deseado. Una buena jugada por la banda derecha del Louis II, provocó que Rony Lopes, con colaboración de Radamel Falcao, empujara el balón a la portería del guardameta visitante. Sin embargo, el VAR, de nuevo apareció en el transcurso del partido. El colegiado se percató de que Falcao se encontraba en posición antireglamentaria, por lo que el 3-0 no subió al marcador.
Tras estos minutos iniciales, el partido sería destacado por multitud de imprecisiones y escasas llegadas a las áreas contrarias. El juego no era vistoso, sin embargo era beneficioso para el Mónaco, ya que cada vez estaba más cerca de enfrentarse al Paris Saint Germain en la final del torneo.
El partido acabó con victoria del conjunto local por un total de 2-0. Encuentro en el que el VAR y, la conexión Rony Lopes-Radamel Falcao, fue lo más destacado del choque. Fácil victoria de los de Jardim que se hacen con ese ansiado pase a la final. Tras ello, se repetirá la misma final que el año pasado, cuando el PSG se impuso por 1-4 a los monegascos. El Mónaco tiene en su bolsillo el posible primer título de la temporada 2017-2018.