La Lazio estará en el sorteo de Nyon para los cuartos de final de la Europa League después de remontar la eliminatoria con un 0-2 conseguido en Kiev. El conjunto de Simone Inzaghi fue desde el principio a por el partido y lo consiguió con dos goles a balón parado, uno en cada parte del encuentro. El Dinamo de Kiev planteó un partido excesivamente defensivo con la misión de aguantar los dos goles a domicilio conseguidos en el empate a dos de la ida. Sin embargo, los ucranianos cedieron demasiado el balón y no crearon prácticamente ocasiones de peligro, llegando solamente a la portería defendida por Strakosha mediante contraataques.

Hoy sin Milinkovic-Savic por una sobrecarga, la Lazio demostró que también puede vivir sin el serbio. Luis Alberto fue quien ocupó la posición de interior izquierdo, realizando un gran partido. Suya fue además la asistencia en el 0-1 a Lucas Leiva en un saque de esquina. El centrocampista brasileño aprovechó una mala salida de Boyko para adelantar a su equipo con un magnífico remate de cabeza. Antes del gol, el Dinamo había generado peligro en un par de transiciones donde la defensa no había dado síntomas de seguridad.

La Lazio monopolizó la posesión del balón en prácticamente todos los tramos del partido. Durante la primera parte llegó incluso a rozar el 75%. Felipe Anderson fue el jugador más desequilibrante del ataque italiano. El futbolista brasileño volvió locos a los defensores del Dinamo cambiándose constantemente de banda y generando peligro con la velocidad de sus arrancadas. Precisamente él fue quien provocó dos de las tres tarjetas amarillas que recibieron los futbolistas locales.

Pese a dominar, los biancocelesti no terminaban de sentenciar la eliminatoria y todo parecía seguir aún en el aire, puesto que un solo gol del Dinamo les daba el pase a los ucranianos. Un remate de Patric a bocajarro y una falta de Luis Alberto que se fue rozando la escuadra fueron tan solo dos de las muchas ocasiones que desperdició la Lazio. Simone Inzaghi decidió cambiar ambos carrileros para que el equipo no perdiera frescura y siguiera con el buen trabajo realizado hasta el momento. Se marcharon Lulic y Patric para que entraran Jordan Lukaku y Marusic. El belga estuvo realmente activo en los veinticinco minutos aproximados que disputó, con un par de acciones sensacionales. El sufrimiento de Inzaghi y los suyos terminaría con el 0-2 de De Vrij cuando faltaban menos de diez minutos para el final. El central holandés empujó con su pierna izquierda un remate de Luiz Felipe en un nuevo córner. Fueron las jugadas a balón parado las que le dieron el pase a los italianos.

A parte de la clasificación para cuartos, otra buena noticia para la Lazio es que ninguno de sus jugadores apercibidos (Immobile y Lukaku) vieron la amarilla. Esto deja al equipo a priori con toda su plantilla disponible para la próxima fecha que se disputará el 5 de abril.

Primero fue la Roma en Champions frente al Shakhtar, y ahora la Lazio contra el Dinamo. Los equipos de la capital italiana han conseguido superar sendas eliminatorias europeas contra equipos ucranianos. Con la victoria de hoy, la Lazio rompe un bache de cuatro partidos sin ganar entre Coppa Italia, Serie A y Europa League. No ganaba desde el pasado 25 de febrero cuando derrotó por 0-3 al Sassuolo. Quizá esta pueda ser la temporada en que la Lazio se quite la espina del año 1998, y por fin llegue a coronarse como campeones de la Europa League. De momento, seguro que ningún equipo quiere al conjunto biancocelesti como rival para cuartos.