En el marco de una nueva jornada de Serie A, Napoli recibía la visita de Chievo Verona bajo presión tras la victoria de Juventus a domicilio ante Benevento. La vieja señora había logrado este sábado una victoria contundente en casa de ‘las brujas’, ello obligaba al Napoli a ganar para no quedarse atrás en la lucha por el Scudetto pues una derrota del conjunto napolitano los dejaría a siete puntos de la Juventus con apenas siete jornadas en disputa.

El cuadro dirigido por Sarri tuvo un mes de marzo bastante malo en cuanto a resultados. Apenas una victoria ante Genoa por la mínima en San Paolo logró capitalizar durante ese periodo, afrontando un empate a un gol en casa de Sassuolo, un par de donitas ante Inter de Milán en San Siro y una goleada sufrida en casa ante Roma (2-4).

Consecuencia de estos malos resultados, Juventus se apropió del liderato de la tabla de posiciones, por ello entonces el Napoli debía dejar atrás esta etapa negativa para continuar en la lucha por el Scudetto.

El Estadio de San Paolo, testigo de las huellas de Diego Armando Maradona, recibía la visita de Chievo Verona para que Napoli buscara redimirse tras el oscuro pasaje que representó el mes de marzo para el club. 

El partido se vislumbró bastante frío, mecanizado. El Napoli dominó sin problemas el primer tiempo, la victoria era necesaria y los jugadores del cuadro local estaban conscientes de ello. La presión ejercida por la victoria de Juventus obligó al Napoli a buscar el partido desde su inicio.

Al 16’ Callejón fallaría una oportunidad clara de estrenar el marcador luminoso, el español recibió un balón frente a la portería producto de un centro y malgastó la chance de anotar el primer gol del encuentro. El objetivo era claro para Napoli, pero la defensa del Chievo y su portero Sorrentino fueron factores claves para que el cuadro local no consiguiera hacerse con el gol que les diera la ventaja en el marcador durante la primera mitad de partido.

La segunda parte llegaría al mismo ritmo, apenas tres minutos de iniciada Dries Mertens cae dentro del área tras ser agarrado por un rival y el árbitro señalaría la pena máxima para el cuadro napolitano. Sería el mismo delantero belga quien tomara el balón y ejecutara el penalti que no pudo convertir en gol pues se encontró con un Sorrentino que consolidaba un partido fenomenal, perdiendo así la oportunidad más clara para el Napoli que entraba en desespero. 

Los nervios consumían a un conjunto que dominaba, generaba y atacaba pero que no lograba trasladar el dominio al marcador. Al minuto 64’ Sarri movía las piezas para intentar buscar el partido, entraría Milik en sustitución de Marek Hamsik, quien por cierto alcanzaría el record de 388 presencias con la camiseta del Napoli. Al minuto 70 el recién ingresado tendría un mano a mano con Sorrentino y el portero del Chievo saldría victorioso.

Tres minutos más tarde y aprovechando la condición de desespero en la cual se encontraba sumido el conjunto napolitano, el cuadro que dirige Rolando Maran rompería el silencio que ahogaba al marcador, el encargado de enviar el balón al fondo de la red sería Stepinski, adelantando así al conjunto veronés contra todo pronóstico en San Paolo.

El desespero crecía, ya no era únicamente el hecho de no concretar, ahora además Napoli perdía y el partido estaba escapando. Sorrentino seguía imbatible y el cuadro napolitano parecía condenado a quedar a siete puntos del líder Juventus.

El final del partido estaba llegando, el Napoli estaba perdiendo, San Paolo estaba a la expectativa de algún Maradona que se atravesara para iguala las acciones. Sucedió entonces al 89’ el gol que brindaría el empate al Napoli por intermedio de Milik.

San Paolo celebraba el empate, pero Napoli apenas estaba sumando un punto y seguía en la situación inicial. Corría el tiempo de descuento y los hinchas del cuadro local coreaban el 'un giorno all'improvviso', había córner a favor y Diawara recibía el balón dentro del área para luego anotar el gol que consumaría la remontada del cuadro napolitano y desataría la euforia en San Paolo, sellando así el 2-1 definitivo que le brindaría los tres puntos al Napoli para continuar en la lucha por el Scudetto.

Restan siete jornadas de la Serie A, Juventus aventaja a Napoli por cuatro puntos. Los de Sarri deberán afrontar una dura visita a San Siro donde enfrentarán al Milan que dirige Gennaro Gatusso, mientras que el Chievo recibirá en el Marc’Antonio Bentegodi al Torino. Las últimas jornadas de Serie A se tornan interesantes y en el calcio sucede de todo.