El pasado domingo se confirmó el ascenso del Padova a la Serie B cinco años después. Lo hizo después de la derrota de la Reggiana por 1-0 en su visita al AlbinoLeffe. Lo hace proclamándose campeón del grupo B de la Serie C, obteniendo uno de los tres billetes que dan vuelo directo a la categoría de plata.

Un camino que no ha sido nada fácil. En la temporada 2013-2014 se consumó su descenso a la tercera división. Pero esto no fue lo peor, ya que poco después se oficializó la bancarrota de la escuadra. El fin se cernía sobre el histórico Padova, por el que pasaron jugadores como Alessandro Del Piero, Angelo Di Livio, Demetrio Albertini, Alexi Lalas, El Shaarawy o Mattia Perin. Una vez más, los problemas económicos sacudiendo el fútbol italiano. Finalmente, se acabó refundando bajo el nombre de Società Sportiva Dilettantistica Biancoscudati Padova, iniciando su operación retorno de la Serie D (4ª división). Ese mismo año no tardaron en tomar el ascensor para ascender hasta la Serie C.

El siguiente paso fue el cambio de denominación, intentado recuperar sus orígenes: primero fue Biancoscudati Padova S.P.A. para, poco después, ser el actual Calcio Padova S.P.A. Sin embargo, las dos próximas temporadas se saldaron con el mismo resultado. Clasificados para la odisea de los Playoffs (participan hasta 27 equipos), cayendo en las primeras fases. Historia que iba a cambiar a partir de la presente 17/18. Desde el inicio hasta el final, los pupilos de Pierpaolo Bisoli gobernaron el grupo B de la Serie C, confirmando así su merecido ascenso tras los pinchazos de sus principales perseguidores (Reggiana y Sambenedettese) a falta de dos jornadas. Dos figuras clave han sido la del máximo goleador Alessandro Capello (doce goles) y Marco Guidone (nueve dianas).

Ahora, los otros dos cupos para acompañar al Padova a la Serie B se decidirán en breves. Por un lado, en el grupo A se lo pelean el Livorno y Robur Siena. Por el otro, el grupo C con Lecce, Trapani y Catania.

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