Robert Kenedy se ha convertido, en menos de media Premier League, en uno de los ídolos de la afición del Newcastle, gracias a la brillante segunda mitad de temporada realizada por los Magpies. El equipo que juega como local en St James Park, consiguió la cesión hasta final de temporada del polivalente mediocentro procedente del Chelsea, equipo con el que firmó en julio de 2015.
Su llegada ha aportado desequilibrio en el carril izquierdo del conjunto dirigido por Rafa Benitez, quien puso su confianza en el exjugador de Fluminense desde su llegada.
Tras 13 partidos, dos goles (en un mismo partido), dos asistencias, y conseguir finalizar décimos en la clasificación, el internacional con Brasil en categorías inferiores se despide del equipo que le ha dado la oportunidad de tener una continuidad que no obtuvo en Stamford Bridge, haciéndole sentir pieza importante en un equipo de alto nivel, requisito necesario para la correcta evolución de cualquier joven de 22 años.
El jugador vuelve al Chelsea, declarando que se siente "afortunado" por haber podido ir a "uno de los clubes más importantes de Inglaterra". "Todos los jugadores, todo el cuerpo técnico y la afición me han hecho sentir como en casa. He ganado en confianza por el gran apoyo recibido y he disfrutado mucho. Quizás algún día vuelva", expresó.
Al mismo tiempo, se mostró alegre, recordando el día de su debut, indicando que no esperaba "algo así". Por encima de todo, quiso resaltar a los aficionados del Newcastle, de los que destaca que son "increíbles". "Me he convertido en "fan" de los aficionados del equipo", concluyó.
Con estas declaraciones, se presupone finalizada su etapa en Tyneside pese al interés mostrado por su entrenador en adquirir sus servicios, donde encontrarán una gran competencia, debido a que será objeto de deseo de grandes clubes europeos este verano.